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* Lourdes Galaz *

Los controles de Gobernación

* Nuevas reglas del juego en la relación gobierno-prensa * 30% del gasto publicitario federal para la televisión * Más de 2, 000 millones de pesos previstos para servicios de información y difusión en el 2000 * Además, 1,500 millones a campañas electorales

Ahí estaba y crecía, avanzaba la globalización de la economía y a muy pocos les interesaba el asunto. Hasta que las protestas contra la liberalización comercial y todas sus consecuencias fueron noticia de primera plana en los diarios y ocuparon el costosísimo tiempo de la televisión en las principales capitales del planeta, mujeres y hombres de esta gran sociedad de mercado comenzamos a tomar conciencia de la aldea global que habitamos... y en esas estamos cuando a comunicólogos y comunicadores empieza a preocupar qué pasará en este mundo si ųƑya ocurre?ų somos presa de la información globalizada. Y, como en historias de cronopios y de famas (Julio Cortázar, claro) se recrea la imaginación: a través de la información globalizada se pueden producir formas más avanzadas de democracia y de participación; y, bueno, también maneras sutiles de neoautoritarismo y de manifestación de los modos de pensar o de vivir. ƑY no existe, tal vez, el peligro de mensajes únicos producidos a nivel planetario por grandes centros de información mundial? ƑNo sucede, cada vez con más frecuencia, que las noticias internacionales que difunden los medios como primicias importantes son filtradas o prefabricadas? ƑQué eso no ocurrió, por ejemplo, durante la guerra del golfo Pérsico?

Y en tanto la información globalizada nos arrolla, aquí mismo, en este país, en esta semana el tema de los servicios de difusión e información, que pudo haber sido una importante noticia nacional, sólo interesó a un par de columnistas ųuno de ellos, Raúl Trejo Delarbre, reconocido investigador en las ciencias de la comunicación. Cuando se aprueban los millonarios presupuestos para las campañas electorales y se esperan recortes en el gasto de la administración pública federal, la Secretaría de Gobernación publica en el Diario Oficial de la Federación un acuerdo por el que se establecen las "normas y lineamientos generales para la erogación de recursos presupuestales en materia de comunicación social para el ejercicio fiscal del año 2000". Y no es otra cosa que el enésimo intento de controlar los gastos publicitarios del gobierno, que el año pasado habrían alcanzado los 2 mil millones de pesos, según cifras oficiales registradas en la partida 3600 del presupuesto del gobierno federal.

Obviamente, existen otras partidas, otras formas de gastar recursos fiscales en propaganda que no se contabilizan en el ejercicio presupuestal, aunque representen montos muy importantes para la hacienda pública, como es el equivalente en pesos y centavos de 12.5 por ciento del tiempo de transmisión (comercial) de la televisión y la radio privadas, que desde el sexenio de Gustavo Díaz Ordaz (julio de 1969) por ley le corresponde al Estado. Ese tiempo oficial representa decenas, cientos de millones de pesos en impuestos que no pagan las empresas de radio y Tv y que usted y yo no sabemos cómo, en qué medida, con qué criterios emplea el gobierno, ni por qué las empresas lo cubren en horas de la madrugada o en programas que a nadie importa; mucho menos sabemos quién contabiliza y controla el uso de ese 12.5 por ciento del tiempo oficial en los medios electrónicos. La responsabilidad legal de administrar esos tiempos recae en la Secretaría de Gobernación, a través de su dirección de Radio, Televisión y Cinematografía (RTC).

Vale la pena un análisis a fondo de los contenidos del acuerdo que publicó la SG, pues se trata de nuevas reglas del juego para la relación financiera del gobierno con los medios. Interesa el asunto porque la aplicación a pie juntillas de esa norma podría llevar a la desaparición de cientos de periódicos y revistas y a privilegiar a ciertos medios, sean diarios o emisoras de radio y televisión. También ųpor qué no decirloų el acuerdo concentra en la Secretaría de Gobernación las decisiones sobre qué, cómo y cuándo se emiten mensajes o campañas de difusión en todas las dependencias oficiales y en las paraestatales. Más aún, la SG podrá autorizar los gastos en servicios de información o difusión en este o aquel medio, siempre y cuando la dependencia presente estudios de mercado, encuestas de opinión, grupos de enfoque o cualquier otro análisis similar que muestre que el medio elegido para difundir los mensajes llegue, efectivamente, al público objetivo de la campaña (marketing de nivel). O sea, que nada de privilegiar a un diario porque políticamente conviene al secretario de Estado, o de hacerle el favorcito a tal empresario o al compadre periodista... si el medio elegido por la dependencia no convence a los burócratas de Gobernación, o éstos reciben línea de cancelar cualquier acuerdo, convenio o contrato con tal o cual medio, se acabó el envío y facturación de materiales publicitarios.

Que desaparezcan decenas o cientos de publicaciones no importaría, pues en México se leen muy pocos periódicos, y la preferencia por la prensa escrita se ha ido perdiendo en los últimos años no sólo debido al poco adquirido hábito de la lectura, gracias también al irrefrenable crecimiento de la radio y la televisión. Y el dominio de estos medios sobre la prensa escrita no sólo se manifiesta a través del público, sino por los elevados montos de inversión publicitaria ųla mayor fuente de financiamiento de cualquier órgano de informaciónų que efectúan, además de las empresas comerciales, el propio gobierno y otras instituciones, como los partidos políticos, el Instituto Federal Electoral, los gobiernos estatales y las universidades, entre otros. Tan sólo el año pasado, según cifras de la SG, casi 30 por ciento de los 2 mil millones de pesos del gasto de publicidad del gobierno central se invirtió en la televisión; 16.4 por ciento se fue a la radio, 10.4 se facturó a una veintena (el monto mayor fue en 5 periódicos) de diarios nacionales editados en el DF, y 2.6 por ciento en otros publicados en provincia. ƑY sabe usted cuántos diarios y revistas se editan hoy en México? Según la Dirección de Comunicación Social de la Presidencia, se publicarían 32 en el DF y 334 en el interior del país. También se reportan 316 revistas de todos los géneros, aunque en la Presidencia se reconocen únicamente 35 de información y análisis, y de circulación nacional o regional... y la mayoría sobrevive por los anuncios del gobierno, si no es del federal sí por lo que facturan a las administraciones estatales y municipales. En gastos de publicidad no hay dinero que alcance, mucho menos si son para hacer política... y este año el financiamiento público para gastos de campañas supera los mil 500 millones de pesos... más lo que se acumule.

En tiempos

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* Ningún reconocimiento del FMI para el pueblo de México

* Primer año de Hugo Chávez

* En Austria, la peor crisis de Europa desde 1945

Allá por Cancún se encontraron los ministros de finanzas de 20 países de Latinoamérica y sus vecinos, los ricos del norte. Dicen que hablaron de los esfuerzos para remediar la pobreza en la región, el lavado de dinero, la evasión fiscal y hasta de la corrupción. Fue un buen foro para que Zedillo y Gurría presumieran de los buenos augurios sobre el futuro nacional que hizo el todavía presidente del FMI, Michel Camdessus. Tan es así, que el buen Camdessus habló con gran optimismo de México y, claro, hizo un reconocimiento a los paladines del neoliberalismo mexicano que "enfrentaron la crisis con una mezcla de valentía y prudencia" (sic). Valentía, porque impusieron medidas impopulares en contextos políticos difíciles, y prudencia, porque supieron encontrar el equilibrio macroeconómico y la confianza de los mercados... Y para el aguantador pueblo mexicano, ni una mención.

El pasado 2 de febrero el controvertido presidente Hugo Chávez celebró su primer año al frente del gobierno de Venezuela con actos oficiales que dieron prueba de la popularidad del militar que hace ocho años dirigió dos intentonas golpistas para derrocar al ex presidente Carlos Andrés Pérez. En 10 meses, Chávez convocó a tres consultas electorales que ganó con el voto duro de 3 millones de venezolanos (33 por ciento de un padrón de 11 millones de electores) que le son fieles con todo y la severa crisis económica, el aumento de la corrupción y la pobreza en aquel país bolivariano. Feliz, Chávez celebra su primer año en el gobierno con una nueva Constitución que le permite relegirse, y que legalizó la desaparición de la Corte Suprema de Justicia y el Congreso Legislativo, aplastando a la oposición y a los dos partidos que se alternaron el poder los últimos 40 años.

Austria vive hoy la crisis política más grave desde 1945 en Europa. La Casa Blanca y el gobierno de Tel Aviv retiraron a sus embajadores de Viena, y los gobiernos de la Unión Europea condenaron la entrada del ultraderechista Jorg Haider al gobierno del presidente Thomas Klestil, con ocho años en el poder y relecto hasta el 2004. Más de 15 mil austriacos marcharon el pasado miércoles en protesta por el rompimiento de la coalición del partido popular y los socialdemócratas. En las últimas elecciones, los democristianos y la ultraderecha que comanda Haider lograron la mayoría en el parlamento austriaco (104 de 183 escaños), y todo hace suponer que el neonazi Haider se perfila como canciller federal, en sustitución del socialdemócrata Viktor Klima. Y todo esto viene a cuento porque, en este mundo globalizado, ahora resulta que "la izquierda teme que seamos un modelo para Europa", afirma el virtual canciller Haider, quien no se deslinda de sus filas con Hitler, y mucho menos de su amistad con el ultraderechista francés Jean Marie Le Pen y con la nieta del Duce, Alessandra Mussolini.

Que desaparezcan decenas o cientos de publicaciones no importaría, pues en México se leen muy pocos periódicos, y la preferencia por la prensa escrita se ha ido perdiendo en los últimos años

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