Ť Los 14 grupos propietarios pagaron 532 mdd por esas plantas en 1992


Ingenios deben 2 mil mdd al gobierno

Ť En Veracruz, 12 establecimientos están en riesgo de cerrar, perjudicando a casi 500 mil personas

Angélica Enciso /I Ť Los 14 grupos propietarios de los 60 ingenios que existen en el país adeudan al gobierno mexicano 2 mil millones de dólares, cifra que supera en 300 por ciento el costo total que pagaron por esas plantas en 1992 y que sumó 532 millones de dólares.

A ocho años de que terminó su privatización, la industria azucarera mantiene su ''deuda histórica'' con Financiera Nacional Azucarera (Finasa), por créditos adquiridos entre 1988 y 1994. Desde hace tres años los grupos Consorcio Azucarero Escorpión (Caze), Machado y Santos comenzaron la restructuración de los adeudos y sólo el primero ha concluido el proceso, indica información de la Cámara Nacional de la Industria Azucarera y Alcoholera (CNIAA).

A partir de 1995 el país pasó a ser autosuficiente en la producción del dulce, al obtener 4.8 millones de toneladas en promedio al año y generar excedentes, ya que el consumo nacional promedio es de 4 millones de toneladas. Al tiempo, se empezó a ahondar la crisis del sector, ya que sumado a la deuda los industriales se enfrentaron a la competencia de la alta fructosa y a la saturación del mercado doméstico por los abundantes inventarios del dulce --en este momento hay 575 mil toneladas.

De acuerdo con organizaciones e investigadores, a causa de esa situación hay 12 ingenios en Veracruz que padecen los problemas financieros más graves y podrían cerrar, con lo que se verían afectados los ingresos de 456 mil personas que dependen de la agroindustria azucarera. Se trata de los ingenios Central Progreso, Cuatotolapam, El Carmen, El Higo, Independencia, La Concepción, Mahuixtlán, San Francisco, El Naranjal, San Gabriel, San José de Abajo, San Miguelito y San Nicolás.

''Todos los ingenios son rescatables, pero se deben poner en su marco de realidad, y se debe revisar a cada uno para evitar que se cierre una fuente de empleo'', consideró el dirigente de la Unión de Cañeros de la Confederación Nacional de Propietarios Rurales, Miguel Ortiz Jonguitud.

Aunque hasta ahora no se ha producido el cierre de estas plantas, sí se han puesto a la venta. A principios de año Caze anunció que vendería sus diez ingenios que aportan el 22 por ciento de la producción nacional de azúcar.

Autosuficiencia azucarera

En 1995, un año después de que entró en vigor el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), la industria azucarera logró ser superavitaria. Entre 1988 y 1994 la producción se mantuvo en promedio en los 3.5 millones de toneladas, mientras el consumo es de 4 millones de toneladas. Pero a partir de 1995, el segundo año de vigencia del tratado, se comenzaron a generar excedentes y en los dos últimos años la zafra llegó a 4.8 millones de toneladas, indican datos de la CNIAA.

En el texto original del TLCAN se estableció que si México era autosuficiente por dos años consecutivos podría exportar todos sus excedentes a Estados Unidos, pero esto no se cumplió.

Estados Unidos no acató lo establecido en el TLCAN, ya que argumentó que las cartas paralelas que se enviaron dos de los negociadores después de suscrito el texto modificaron el acuerdo original, y ahora los industriales prevén que según lo establecido en estos últimos documentos, en octubre sus exportaciones podrán pasar de las 25 mil toneladas a las 150 mil.

El resultado del TLCAN para el azúcar fue considerado por el gobierno e industriales ventajoso para México, a diferencia de lo ocurrido en otros productos agrícolas. Sin embargo, en noviembre de 1993 el entonces representante comercial de Estados Unidos, Michael Kantor, y el ex secretario de Comercio, Jaime Serra Puche, intercambiaron cartas en las que se modificaba lo establecido en el texto original del TLCAN. Estados Unidos dio reconocimiento jurídico a esos documentos, mientras para los mexicanos no tienen carácter legal.