MARTES 20 DE JUNIO DE 2000

* Al parecer eran chinos indocumentados que intentaban llegar a Londres


Encuentran 58 cadáveres en un camión de tomates holandés

* Urgente, desarrollar una política común de inmigración, dicen los países de la Unión Europea

Afp, Ap, Dpa y Reuters, Londres, 19 de junio * Los cadáveres de 54 hombres y cuatro mujeres, inmigrantes indocumentados al parecer procedentes de China, fueron encontrados esta madrugada en un camión frigorífico cerrado herméticamente que transportaba tomates, y que arribó al puerto británico de Dover. Ante esta tragedia, la Unión Europea (UE) subrayó la urgencia de desarrollar una política común de inmigración y asilo para la comunidad.

El camión, con registro holandés, había cruzado el Canal de la Mancha en un Ferry desde el puerto belga de Zeebrugge el domingo por la tarde, antes de llegar a Dover, donde las autoridades aduaneras decidieron inspeccionar el vehículo por considerarlo sospechoso. "El camión no siguió nuestra ruta y pagó en efectivo la tarifa del Ferry", dijeron fuentes de la aduana al explicar por qué se decidió inspeccionar un vehículo de trasporte proveniente de países de la UE.

Al abrir el contenedor del camión se descubrieron los 58 cadáveres entre los paquetes de tomates, y a dos hombres que aún estaban con vida, y que fueron llevados inmediatamente a un hospital. La policía afirmó que cuando los sobrevivientes se repongan, sus testimonios serán fundamentales para encontrar a los traficantes de personas responsables del fallido traslado de los 60 indocumentados.

Por lo pronto se improvisó una morgue en las instalaciones del puerto, donde se instalará también una capilla ardiente.

Los primeros dictámenes indicaron que todos murieron por falta de oxígeno. El contenedor no sólo no permitía la entrada de aire fresco al interior, sino que captaba emanaciones de dióxido del motor. El sistema de refrigeración del vehículo, sin embargo, no se encendió durante todo el traslado.

El ministro británico del Interior, Jack Straw, se manifestó "consternado por la pérdida de vidas", y aseguró que el incidente será investigado hasta localizar a quienes introdujeron a esas 60 personas al vehículo. Fuentes policiales dijeron que traficantes de personas pueden cobrar hasta 30 mil libras esterlinas (20 mil dólares) por un traslado de Asia a Londres.

A su vez, el primer ministro británico, Tony Blair, desde la cumbre de la UE en Portugal, afirmó que su gobierno tomará medidas encaminadas para "impedir que se ayude a introducir gente de manera clandestina a nuestro país".

En el contexto de esta investigación, trascendió que, por lo pronto, el conductor del trailer está detenido y es sometido a interrogatorio. Desde Rotterdam, Holanda, el consorcio de transporte anglo-holandés PetO StenaLine, afirmó que los datos correspondientes de la sociedad propietaria del camión son falsos, al igual que las placas. Ni siquiera existe el número telefónico que constaba en el registro de la empresa que supuestamente es propietaria del vehículo. Las fuentes de la empresa indicaron que lo único en todos los datos del camión que corresponde a la realidad "son los tomates" que transportaba.

Una ley sobre inmigración clandestina entró en vigor en abril pasado, y prevé fuertes multas para conductores de camiones que introduzcan al país a indocumentados. La legislación también prohíbe a inmigrantes solicitar asilo en el puerto de llegada. Con esta medida se pretendía evitar que los puertos británicos funcionaran como "imanes" de inmigrantes que podían solicitar asilo tan pronto pisaban territorio inglés.

El año pasado llegaron a Dover mil 130 indocumentados, lo que hizo que la vigilancia en el puerto se intensificara y actualmente es uno de los puertos europeos con mayores controles contra la inmigración.

El alto comisionado de la Organización de Naciones Unidas para los Refugiados, Soren Jessen-Petersen, aseguró que esta y otras tragedias en la que inmigrantes indocumentados mueren tratando de lograr una mejor vida en un país desarrollado se debe en parte a las leyes de inmigración europeas.

El responsable resaltó que muchos de los inmigrantes que ya tienen residencia legal en los países europeos llegaron a estas naciones gracias a traficantes de personas. Insistió en que debe haber una responsabilidad a nivel mundial para lograr leyes que impidan que los pobres se conviertan "en víctimas de quienes se aprovechan de su necesidad".