LUNES 14 DE AGOSTO DE 2000

Ť Jornada de atentados y enfrentamientos entre soldados y separatistas indios


Dieciséis muertos y 52 heridos en Cachemira

Ť En Pakistán, una bomba deja 16 lesionados Ť Dos explosiones en Filipinas ocasionan 4 fallecimientos

Ap, Reuters y Afp, Jammu, 13 de agosto Ť Al menos 16 muertos y 52 heridos es el saldo de atentados con explosivos y enfrentamientos entre las fuerzas indias y separatistas, ocurridos hoy en el lado indio de Cachemira, dos días antes de la conmemoración de la independencia india de Gran Bretaña. En Pakistán, una bomba dejó 16 heridos en un mercado de Lahore; mientras, en Filipinas, cuatro personas fallecieron y 23 resultaron heridas por la explosión de una bomba y una granada en dos ciudades del archipiélago.

En el primer atentado, en Cachemira, cuatro guardias fronterizos murieron cerca de la ciudad de Kud, 80 kilómetros al norte de Jammu, capital de invierno Cachemira, cuando estalló una mina al paso del autobús en el que viajaban. Otros 45 guardias resultaron heridos, varios de ellos de gravedad. Dos horas después, otra mina explotó a unos 800 metros de donde ocurrió el primer atentado con saldo de un muerto y siete heridos.

El grupo rebelde pro paquistaní Hizbul Mujaideen se atribuyó los atentados. Esa agrupación suspendió la semana pasada una tregua de 15 días. Además de Hizbul, otras agrupaciones separatistas amenazaron con boicotear las celebraciones previstas para el martes en India.

Poco después, cuatro civiles resultaron heridos por la explosión de un artefacto cerca de Dal Gate, en el centro de Srinagar, donde los uniformados realizan redadas casa por casa ante la posibilidad de nuevos atentados.

En otro incidente, cinco soldados indios murieron en Aknoor, en un ataque de fuego de artillería y morteros lanzados desde el lado paquistaní de la línea de control que divide Cachemira. India acusa a Pakistán de promover la violencia de los separatistas en Cachemira, pero Islamabad sostiene que sólo brinda apoyo moral. Pakistán conmemora su independencia este lunes.

En la ciudad paquistaní Okara, a 130 kilómetros de Lahore, 16 personas resultaron heridas por la explosión de una bomba en el mercado de Okara. La policía atribuyó el incidente a "terroristas" y hasta el momento ningún grupo se atribuyó el atentado.

En Filipinas un niño de 13 años y un soldado murieron por una bomba que estalló cerca de un puesto de hamburguesas en la ciudad de Carmen, al sur del país. Otras 11 personas resultaron heridas. La policía centró sus sospechas en el separatista Frente Moro de Liberación Islámica.

En Manila, un grupo de ladrones detonó una granada en una joyería en un intento de asalto que dejó un delincuente y un policía muertos. El gobierno filipino afirmó que los dos atentados no tienen relación y pidió a la población mantener la calma.