MARTES 12 DE SEPTIEMBRE DE 2000

Ť Destituyen al alcalde priísta de Huiztán por el sistema de usos y costumbres


Retienen campesinos a 7 funcionarios chiapanecos

Angeles Mariscal y Elio Henríquez, corresponsales, Tuxtla Gutiérrez, Chis., 11 de septiembre Ť Integrantes del Movimiento Campesino Revolucionario Independiente (Mocri) de la región selva, retienen desde hace siete días a funcionarios municipales de Benemérito de las Américas -uno de los siete municipios recientemente creados en la zona de influencia zapatista-, a quienes exigen láminas para la construcción de viviendas.

Entretanto, habitantes de 42 comunidades, a través del sistema de usos y costumbres, destituyeron por "falta de capacidad para gobernar" al alcalde priísta de Huixtán, Samuel Hernández Pérez, y al síndico Belisario Pérez Martínez.

Mariano Ramírez García, dirigente del grupo de casi 100 inconformes -oriundos de la región selvática de Marqués de Comillas- que tiene en su poder la presidencia municipal de Benemérito de las Américas desde el pasado día 4, señaló que sus seguidores solicitan al edil, José Luis Hernández Cruz, que les entregue 500 láminas de zinc.

El líder de una sección del Mocri que recientemente se separó del resto del grupo, acusó el munícipe de nepotismo y mala administración, por lo que también exigió se le practique una auditoría.

Como medida de presión, al momento son retenidos en la alcaldía Bersaín García, Reynaldo Moreno, Manuel Izcano y Fredy Melgar, tesorero, síndico, regidor y jurídico del ayuntamiento, respectivamente. Según los inconformes, sólo permitirán señalan la salida de los funcionarios municipales y el retorno del edil hasta que se dé respuesta positiva a sus demandas.

Al respecto, el alcalde Hernández dijo, entrevistado en la capital del estado, que en enero anterior se citó a los representantes de las 12 comunidades que comprende el municipio para distribuir los recursos anuales, según "las necesidades más urgentes de la población", pero "el grupo disidente del Mocri nunca llegó".

Entretanto, habitantes de 42 de las 48 comunidades que componen el municipio de Huixtán destituyeron al presidente municipal y a su síndico, Samuel Hernández y Belisario Pérez, a quienes acusaron de no cumplir "las promesas de construir obras de beneficio social en la zona rural". Además, se quejaron de que el alcalde "ya no vive en Huixtán, sólo se la pasa en San Cristóbal y por lo mismo no atiende a la población".

En otro contexto, el obispo de Tuxtla Gutiérrez, Felipe Aguirre Franco, afirmó que el reacomodo del clero chiapaneco "se constituye como uno de los factores para la reconciliación intercomunitaria", y el término de los conflictos generados por la rebelión zapatista.