VIERNES Ť 5 Ť ENERO Ť 2001

Ť Recomienda la SEP revisar programas de estudio y cuerpo de maestros

Alta deserción, baja titulación y maestrías de dudosa calidad, entre los problemas de la UPN

Ť La institución, con 76 unidades y casi 53 mil matriculados, se encuentra en la indefinición


CLAUDIA HERRERA BELTRAN

Apuesta para la modernización educativa hace 15 años, la Universidad Pedagógica Nacional (UPN) enfrenta hoy severos problemas: índices de titulación "alarmantes" de hasta 9 por ciento, profesores que acumulan maestrías de dudosa calidad y altas tasas de deserción escolar, indica un diagnóstico de la SEP.

Con una matrícula de casi 53 mil alumnos y 76 unidades en todo el país, la UPN también tiene ante sí la "indefinición", porque en 1989 se planeó que sería la "institución por excelencia del normalismo", la que formaría maestros, pero se ha ido convirtiendo en un "mero centro de capacitación".

El estudio de la SEP, coordinado por el investigador Bonifacio Barba, menciona los casos de la unidad Oaxaca, donde entre 1995 y 1999 se inscribieron mil 137 profesores, egresaron 638 y sólo se titularon 28, y la unidad Hidalgo, donde ingresaron mil 46 maestros entre 1993 y 18999, y sólo se titularon 23 de ellos.

El problema, dice, es que muchos maestros están inscritos en cursos de unidades de la UPN no por tener altos niveles educativos, sino porque los programas en el mercado de formación docente se "abarataron".

La creación de múltiples planes de formación y actualización para el magisterio ha tenido efectos negativos en la UPN, pues ofrece programas de licenciatura "desvinculados entre sí, aunados a los problemas de deserción y bajo índice de titulación".

La tasa de titulación varía mucho entre ciclos escolares porque los requisitos de titulación fueron exigentes en un periodo y sencillos en otro. Por ejemplo, en Zacatecas, en el ciclo escolar 1996-1997 hubo 279 egresados de la licenciatura para maestros de educación prescolar y primaria y sólo se titularon 66; al año siguiente hubo 98 egresados y 329 que obtuvieron su título.

En otros casos el problema de deserción y titulación "es más acentuado". En Durango, dos unidades tuvieron una inscripción de mil 466 profesores en licenciatura, 146 egresados y menos de 40 titulados. Añade que hay aguda deserción en varios estados: en Colima, en 1993 la UPN tituló en todos sus programas a 11 maestros y en 1999, a 21.

Otra crítica es que los programas de la UPN tienen "reducido ámbito de influencia" en los estados. Ejemplos extremos son Tabasco, donde sólo se atendió a 1.5 por ciento de la población docente de la entidad; Oaxaca, con una tasa de 3 por ciento, e Hidalgo, con 4.5 por ciento.

Altos niveles de deserción y bajos porcentajes de titulación son aún más graves en programas de posgrado, como en el caso de la UPN-321 Zacatecas, donde el bajo índice de titulación es "alarmante": de 67 egresados, sólo tres obtuvieron su título.

En los estados del norte casi no existen estudios de doctorado: sólo se registró un egresado en Tamaulipas en el ciclo 1996-1997. En el centro, sólo Guanajuato y Jalisco cuentan con ellos; en el sur hay unidades que reportan alumnos, pero sin cuantificar.

Otra crítica a los planes de posgrado es que "no son muy exigentes". Un informe de la UPN de Chiapas señala: "los maestros se han convertido en consumidores compulsivos de maestrías o estudios, y hay quienes tienen en su haber hasta tres maestrías, pero habría que estudiar más minuciosamente la calidad de los estudios que se imparten y las habilidades que logran los estudiantes".

Por lo anterior, los expertos recomiendan a la UPN "revisar detallada y autocríticamente programas de estudio, criterios de titulación, cuerpo de maestros y asesores de tesis, y el costo invertido a la luz del bajo índice de maestros titulados".