JUEVES Ť 29 Ť MARZO Ť 2001

ASTILLERO

Ť Julio Hernández López

EL GRAN triunfador de ayer fue el presidente Fox. Otros ganadores fueron los diputados que habían impulsado la posibilidad de que el zapatismo hablara en la tribuna de San Lázaro. Los grandes perdedores fueron el PAN y en especial el jefe Diego. Al alza, los comandantes del EZLN y en especial dos, Esther, que pronunció un notable discurso político y de género, y el nuevo personaje protagónico, Fernando Yáñez, el comandante Germán, quien conducirá las negociaciones de paz. A la baja, un pasamontañas que no sucumbió a las tentaciones del strip tease, pero sí dijo un adiós pasado por llanto que a algunos hizo pensar en su envío provisional o definitivo a algún arcón de las montañas de donde sólo volvería a salir en caso de que no se lograran los acuerdos pacificadores definitivos.

GANO FOX, y eso no tiene vuelta de hoja. Tozudo y terco, el Presidente llevó adelante su estrategia de forzar al zapatismo a la vuelta al diálogo mediante el expediente simple de irle entregando cuanto era posible. Arriesgó Fox su capital político y hasta la Presidencia --como había dicho semanas atrás ante una selecta audiencia de periodistas con los que comía-- al grado de colocarse en la delicada situación de recibir recriminaciones en público y en privado de algunos que se creería sus aliados naturales, tales como los panistas y los empresarios.

PARA MUCHOS de ellos, Fox estaba cometiendo un desatino gigante: entregar todo a cambio de nada. Conocidos son los reclamos del panismo, que utilizó la figura de Diego Fernández de Cevallos para simbolizar su rechazo a la política foxista respecto a los insurgentes chiapanecos. Menos conocidos, por darse siempre en el ámbito privado, eran los enojos de empresarios que creían que el Presidente Fox estaba llevando al país a una crisis por su empecinamiento en darles a los zapatistas todo cuanto pedían.

CON EL MUNDO político encima, Fox dijo una y otra vez que la paz y el diálogo estaban al alcance de la mano. Quedó incluso a los ojos del mundo, en su estrategia, como un Presidente sin partido. No es menor el detalle: el guanajuatense aguantó sin contestar todo cuanto dijo Marcos que pudiese haber significado ruptura o retroceso. Contra su naturaleza, Fox se contuvo e hizo que las provocaciones del insurgente se le resbalaran.

FALTA TODAVIA un tramo importante por recorrer en el camino de la paz, pero no debe regatearse de ninguna manera el hecho de que, en este primer segmento, el presidente Fox ganó en varios frentes: fortalece su legitimidad interna y externa, abate riesgos para sus proyectos económicos del sureste, toma distancia del PAN, pero al mismo tiempo queda frente a sus compañeros de partido como ganador y significativamente se instala, en este punto, en una posición política cercana al zapatismo, PRI y PRD.

LAS EXPECTATIVAS de paz que se abrieron a partir de ayer permiten preguntarse qué habría pasado si los zapatistas hubieran regresado a su tierra la semana pasada con las manos vacías, sin haber hablado en alguna de las dos tribunas legislativas federales. Hoy el país estaría preguntándose cuál sería la reacción de los insurgentes al habérseles negado el camino del diálogo que ellos buscaban. La amenaza de la resurrección de las guerrillas estaría presente, y sobrarían las consideraciones en el sentido de que la ruta de la lucha política estaría cancelada. Frente a ese escenario hipotético es posible señalar que quienes se opusieron al uso zapatista de la tribuna se equivocaron, y quienes impulsaron la desacralización del famoso micrófono tuvieron éxito.

GRACIAS A la oportunidad de usar la tal tribuna, el movimiento zapatista pudo, además, redefinirse de una manera impactante. De entrada, una disposición indudable a favor del proceso de paz. Ayer, los comandantes (hombres y mujeres, esperando que no haya feminismo que se sienta agraviado por no usar aquí la expresión "comandanta") reivindicaron el sendero de la política y relegaron el armado, enderezando éste ya hacia un atajo de salida. Reconocieron ellos --el mando supremo del movimiento insurgente-- los gestos y esfuerzos de paz hechos por Fox, e inclusive al gobierno federal mismo, al que las piruetas discursivas del subcomandante Marcos negaban aceptación plena. Ofrecieron --por voz de la comandante Es-ther, en un discurso de gran importancia-- respeto a los legisladores, encomiaron el sentido de la tolerancia ante la diversidad, garantizaron que no habrá ocupación guerrillera de las plazas que han sido desocupadas por el Ejército y asentaron que ellos, los comandantes, son quienes mandan y que el subcomandante ha sido guerrero que ha cumplido bien su tarea y ahora debe replegarse, innecesaria la acción militar que sería su principal responsabilidad.

LA ORDEN de quitar reflectores al subcomandante llevó también la de colocárselos ahora al comandante Germán. El será el enlace con el gobierno federal y deberá ponerse en contacto con el representante de ese gobierno, Luis H. Alvarez. Trabajará en San Lázaro si los diputados se lo permiten. Será la nueva estrella mientras duren las negociaciones de paz, con un pasamontañas y una pipa a la espera de saber si deben volver a cabalgar en caso que las ofertas de paz resulten un engaño, o ser desvanecidos en las montañas chiapanecas para permitir que un ciudadano tamaulipeco de origen, chiapaneco de sentimiento e internacional por fama, se reintegre a la vida política nacional.

FUE EMOTIVO el adiós de Marcos. No sólo el dado afuera del Palacio Legislativo luego de terminada la sesión que necesariamente debe ser llamada histórica. También cuando la comandante Esther subrayaba la importancia de que la tribuna de la discordia no hubiese sido ocupada por un jefe militar en rebeldía, cuando se entendía la razón de la inquietante ausencia del subcomandante en el grupo que había entrado a San Lázaro a nombre del EZLN.

MARCOS ES, sin embargo, la figura de renombre mundial, la presencia política más fuerte y la palabra más impactante de los zapatistas. No deben los armoniosos hechos de ayer nublar el horizonte al grado de ignorar que faltan etapas peligrosas por recorrer, en las que nuevamente pueden darse las tentaciones del arrebato, la cerrazón y el incumplimiento por cualquiera de ambas partes. Físicamente ausente, Marcos será, por ello, el guerrero siempre presto a montar su caballo en caso de que la lógica militar deba volver. Y cuando, en definitiva, la lógica política quede instalada, entonces aquel que prestó su cuerpo al pasamontañas famoso podrá comenzar las nuevas batallas de las que ayer, por lo pronto, Fox fue el principal ganador, nos guste o no.

ASTILLAS:

A LA ESPERA, cual aviones sobre el aeropuerto internacional capitalino, las discusiones legislativas sobre reforma fiscal y el tema energético... Siempre académico, Leonardo Rodríguez Alcaine ha denunciado que los extremismos de izquierda y derecha le quieren "romper el hocico" al cetemismo... El general Rafael Macedo de la Concha asegura que la presencia del cártel de los hermanos Arellano Félix en el Distrito Federal es muy fuerte. Mientras tanto, siguen apareciendo muertos con todo el sello de las bestiales venganzas entre narcos. Pero el gobierno capitalino dice que los índices delictivos bajan... Está por decidirse si Mayito Bezares sigue en libertad o vuelve a prisión, ya que el juez encargado de su caso está por dictar sentencia.

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