MARTES Ť 24 Ť JULIO Ť 2001

Ť Se aplicaría un mecanismo similar al utilizado en el predio La Gringa, indican

Proponen chimalapas crear área de restauración ecológica en terreno que disputan con ganaderos

ROSA ROJAS

Ante el "alto riesgo de un enfrentamiento armado" de graves consecuencias entre la comunidad de Santa María Chimalapa y los ganaderos de la colonia Cuauhtémoc, dado que el conflicto agrario que los confronta por la posesión de 11 mil hectáreas puede tardar años en resolverse, el Comité Nacional de Defensa y Conservación de los Chimalapas está impulsando una vía alternativa de salida al problema, propuesta por los propios comuneros, que consiste en crear en esa superficie una "área de restauración ecológica".

Luis Bustamante, coordinador del citado comité, explicó que se aplicaría en este caso un mecanismo similar al utilizado en 1994 para la recuperación de 40 mil hectáreas del predio La Gringa, también de Chimalapas, que había estado ocupado durante varios años por ganaderos chiapanecos y fue devuelto por el gobierno federal a los indígenas zoques.

Bustamante, quien indicó que la Misión Civil de Paz que está organizando el comité para buscar intermediar en este conflicto podría salir este martes rumbo al Istmo de Tehuantepec; sin embargo, más tarde informó que ya había algunas negociaciones con los colonos de la Cuauhtémoc, quienes entregaron el equipo topográfico y estaban en pláticas para que las esposas de los chimalapas detenidos pudieran visitarlos.

Explicó, respecto a la propuesta de crear un área de restauración ecológica, que en este caso la superficie en conflicto se reintegraría a la comunidad de Santa María Chimalapa en respuesta a una "reivindicación histórica" bajo las condicionantes siguientes:

"Toda la franja o superficie comprendida entre los linderos en disputa deberá ser destinada a una "area de restauración ecológica. Dicha área, actualmente deforestada y quemada en gran parte, por la Colonia Cuauhtémoc, será recuperada en beneficio del medio ambiente y de todos, bajo manejo comunal, pero en el entendido de que ningún comunero de Santa María Chimalapas o Congregación podrá apoderarse de ninguna parte de ella de forma privada, ni darle ningún otro uso.

"Lo anterior se garantizará perfectamente mediante un convenio similar al que se llevó a cabo para la histórica devolución -por parte del gobierno federal- de 40 mil 945 hectáreas del predio San Isidro La Gringa a la comunidad de Santa María Chimalapas, firmado el 8 de septiembre de 1994, superficie que se encontraba en manos de ganaderos y narcos... En dicho convenio de concertación participan las comunidades, el gobierno federal y los estatales, con sus respectivas instancias de competencia, así como éste comité y otras organizaciones de la sociedad civil nacional e internacional interesadas".

De esta manera se lograría, señaló Bustamante, la terminación del largo conflicto de agravios, violaciones de derechos humanos y de mujeres, crímenes, venganzas y delitos ambientales, entre otros, que se han dado entre las partes durante muchos años.

También se rescataría, indicó, ese terreno para crear una área de restauración ecológica, la cual está siendo altamente depredada, y con esa solución quedaría como un importante modelo de manejo comunal a seguir, con participación de organizaciones civiles, académicas, técnicas, científicas y gobierno, que servirá de amortiguamiento entre una zona inminentemente agrícola-ganadera y una de las partes más importantes de la selva de los Chimalapas, como es la Sierra de Tres Picos, que forma parte de esa gran región que es la más rica en biodiversidad de México y Mesoamérica.