MIERCOLES Ť 12 Ť SEPTIEMBRE Ť 2001
EU, BAJO EL FUEGO

Ť El World Trade Center, objetivo del terrorismo

En 1993, una bomba causó seis muertos y mil heridos

Ť Los autores fueron condenados a 240 años de prisión

DE LA REDACCION

El ataque perpetrado contra el World Trade Center (WTC) no fue el primero que sufría ese símbolo del poder económico de la ciudad de los rascacielos. Los corresponsales de La Jornada, David Brooks y Jim Cason, reportaron el 26 de febrero de 1993 la explosión que sacudió a las 12:18 horas (tiempo local) el complejo de siete edificios del WTC, incluyendo las torres gemelas, consideradas hasta ayer la cuarta estructura más alta del mundo.

La explosión ocurrió en el nivel B2 del estacionamiento subterráneo. De acuerdo con varias fuentes, una sección del B2 es área de seguridad no pública en donde se estacionan vehículos oficiales: uno para el uso del presidente de Estados Unidos y otro para el servicio secreto y la Agencia Central de Inteligencia (CIA). En el momento del atentado, al menos 55 mil personas estaban en la torre sur del WTC.

Al principio se pensó que se trataba de una explosión en una planta eléctrica y se ordenó la evacuación de las torres. La mayoría de las personas bajó en medio de una espesa nube de humo que ascendía por las escaleras; otras fueron rescatadas por medio de helicópteros desde el techo, a 110 pisos de altura, y varias más quedaron atrapadas durante horas.

Un cráter de 70 por 30 metros

La bomba colocada en un automóvil cargado con 600 kilogramos de dinamita y oculto en una rampa de acceso al estacionamiento subterráneo del WTC, causó la muerte de seis personas, heridas a mil y daños por casi 300 millones de dólares. La explosión dejó un agujero de 70 por 30 metros y afectó seis pisos. Tras del estallido, densas columnas de humo llenaron los 110 pisos de cada una de las torres.

Al día siguiente, la teoría más popular sobre el suceso era que la bomba fue plantada por militantes serbios o croatas de la ex Yugoslavia. Según la Oficina Federal de Investigaciones (FBI), nacionalistas croatas estuvieron involucrados en una serie de actos terroristas en Estados Unidos durante los años setenta, incluyendo el estallido de una bomba en Grand Central Station, en Nueva York, que mató a un policía.

Sin embargo, versiones de la prensa estadunidense señalaron que las autoridades investigaron la teoría de que terroristas árabes colocaron el coche-bomba para vengar la derrota de Irak ante Estados Unidos en la guerra del Golfo Pérsico, mientras los expertos señalaron que sólo diez organizaciones consideradas como terroristas, entre las que figuraban Sendero Luminoso, el cártel de Medellín y Hezbollah, tenían capacidad para realizar un atentado de esa magnitud.

En contraste, el entonces secretario de Estado, Warren Cristopher, señaló el 28 de febrero de 1993: "no se debe excluir" una posible relación entre el atentado y la crisis en Bosnia-Herzegovina, pero señaló que no era conveniente "aventurarse con conjeturas".

El director de la FBI, James Fox, declaró: "definitivamente se trató de una bomba. Ciertamente, pudo haber sido cualquiera. Recientemente se despidió a mucha gente; podrían ser narcotraficantes de drogas molestos con el gobierno estadunidense; podría tratarse de terroristas, en este momento no queremos hacer conjeturas."

Más tarde, el propio James Fox mencionó entre los presuntos responsables del ataque al grupo integrista Hamas y al Frente Popular para la Liberación de Palestina. Sin embargo, el grupo Hamas, por medio de un comunicado, negó toda responsabilidad en el ataque.

El 5 de marzo de 1993 las investigaciones tomaron un giro inesperado cuando las autoridades arrestaron a dos sospechosos de haber participado en el ataque. El comisionado de policía de Nueva York, Raymond Kelly, informó que se esperaban más detenciones, aunque se negó a declarar sobre los motivos que habría tenido Mohammed Salameh ?el principal sospechoso? para participar en el ataque.

El otro detenido fue identificado como Ibraham Elgabrowny. Las autoridades indicaron que este sospechoso tenía en su poder, en el momento de su arresto, seis pasaportes nicaragüenses falsificados, una pistola nueve milímetros, 150 cartuchos y dos pistolas de salva.

Salameh usó la dirección de Elgabrowny, en Brooklyn, para obtener la licencia de manejo, agregó el fiscal auxiliar federal Henry Depippo. Elgrabrowny es sobrino de Sayyid Nosair, hallado culpable de violar la ley de armas con relación al asesinato del líder judío ultrarradical Meir Kahane, en Nueva York, refirió Afp.terrorist_attacks_6e6

Salameh, según la reconstrucción hecha por la FBI, habría cometido increíbles ingenuidades. Alquiló el automóvil que presuntamente se utilizó en el atentado con su propio nombre y proporcionó a la agencia arrendadora su número de teléfono y dirección. Dejó en su casa los instrumentos usados para fabricar la bomba, y tocó con las manos impregnadas de nitrato (material utilizado para elaborar explosivos) los documentos de la renta del vehículo.

Dos horas después de la explosión se presentó en la arrendadora para informar que le habían robado el automóvil la noche del 25 de febrero. En la agencia le informaron que sólo podían regresarle el dinero del depósito ?400 dólares? cuando denunciara el hurto a la policía. Entonces acudió a presentar la denuncia, pero se olvidó del número de las placas.

El sujeto se presentó tres veces en la agencia para reclamar los 400 dólares; la tercera ya lo esperaban agentes de la FBI.

Posteriormente, el paquistaní Ramiz Yussef, "cerebro" del atentado, fue hallado culpable y condenado a 240 años de prisión en enero de 1998. Luego del juicio de Yussef, la entonces procuradora general, Janet Reno, declaró que la pesada condena del activista islámico constituía "un mensaje a los terroristas del mundo entero".

Antes de Yussef, otras cuatro personas, entre las que están Elgabrowny y Mohammed Salameh, también fueron condenadas a 240 años de prisión por el atentado.

En enero de 1996, otras 10 personas ?incluido el jeque Omar Abdel Rahman, guía espiritual de la organización clandestina integrista egipcia Jamaa al Islamiya? fueron condenadas a largas condenas por un complot terrorista contra edificios públicos, incluido el WTCenter, o infraestructuras de comunicación de la región de Nueva York.