SABADO Ť 20 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Espera que el ERI empiece el desarme

Pospone GB retomar el control del gobierno de Irlanda del Norte

AP

Dublin, 19 de octubre. Gran Bretaña postergó el viernes la decisión de reanudar el control directo del gobierno de Irlanda del Norte, con la esperanza de que el Ejército Republicano Irlandés (ERI) ponga fin a la crisis iniciando el tan esperado desarme para la semana entrante.

Luego de diseñar la estrategia con el gobierno irlandés, el secretario para Irlanda del Norte, John Reid, dijo que la población de la provincia británica está "cansada y harta" de los políticos que dicen que apoyan el pacto de paz de 1998, pero que no han hecho lo suficiente para apuntalarlo.

Reid declaró lo anterior mientras los unionistas del Ulster, principal partido protestante, se reunieron el jueves para discutir su retiro del gobierno de unidad de Irlanda del Norte.

Reid tiene una semana para decidir si retirará el poder de manos del gobierno local, con lo que pondría de hecho a la coalición en un estado de hibernación, o bien, si disolverá totalmente la legislatura, de la cual surge, de acuerdo con la ley, el gobierno.

Aunque se negó a hablar de culpas por la crisis, Reid predijo que los unionistas del Ulster volverían a asumir sus puestos si el ERI da el llamado "paso histórico", permitiendo que funcionarios de desarme recojan algunas de las armas del grupo proscrito.

Promesa incumplida

Los unionistas del Ulster han acordado en dos ocasiones participar en una coalición que incluya a militantes católicos del Sinn Fein, el partido político vinculado al Ejército Revolucionario de Irlandés, a condición de que a ello siga el desarme de la milicia. Pero el ERI debe cumplir aún con su promesa de mayo de 2000 de entregar sus armas en sitios donde estarían "fuera de uso", eufemismo que se ha utilizado en vez de la palabra desarme.

El líder de los unionistas del Ulster, David Trimble, dijo que si el ERI realmente empezara a entregar las armas, él y otros tres ministros del gabinete, pertenecientes a su partido, volverían a sus puestos.

Pero Jeffrey Donaldson, un influyente miembro del mismo partido, que en 1998 criticó el acuerdo de paz por ser demasiado vago, dijo que los unionistas no impulsarán más coaliciones con Sinn Fein, a menos que el Ejército Revolucionario Irlandés deje en claro que habrá un desarme total.