DOMINGO Ť 21 Ť OCTUBRE Ť 2001

Ť Suspende trabajos hasta el martes; son ya 3 instalaciones contaminadas con carbunco

Antrax en oficina de la Cámara de Representantes

Ť Confirman en Argentina que una misiva enviada desde Miami contenía la bacteria Ť La única certeza hasta hoy en todos los casos de cartas es que se usaron timbres de EU: analistas locales

AP, DPA, AFP Y REUTERS

Washington, 20 de octubre. Las autoridades estadunidenses descubrieron restos de ántrax en una oficina de la Cámara de Representantes que procesa el correo dirigido a los legisladores, luego de que esporas de la bacteria fueron encontradas en el Senado, el lunes.

Este hecho, según analistas locales, revela que el poder político constituye, junto a la prensa, uno de los principales blancos de los ataques bioterroristas en Estados Unidos.

Desde Shanghai, el presidente George W. Bush afirmó que los investigadores aún no tienen pruebas de un vínculo entre los sobres que contienen bacterias de ántrax y los atentados del 11 de septiembre en su país.

El hallazgo en el edificio Ford, a unas cuadras del Capitolio, elevó a tres el número de instalaciones donde ha sido detectada la bacteria del carbunco, la cual fue encontrada también en la oficina del líder de la mayoría del Senado, Tom Daschle, así como en un centro de correo frente a la cámara.

Kori Bernards, portavoz del líder del Partido Demócrata en la Cámara, Richard Gephard, indicó que los restos de ántrax fueron hallados en un área donde se envía la correspondencia al edificio Lonfworth, donde están las oficinas de Gephard y del presidente de la Cámara de Representantes, Dennis Hastert.

Por primera vez en su historia, la Cámara de Representantes decidió este fin de semana suspender sus trabajos hasta el martes. "No se trata de una situación inesperada, esta es la razón de por qué hemos estado llevando a cabo pruebas en todo el complejo del Capitolio", dijo el teniente Dan Nichols, portavoz de la policía federal del Capitolio.

Al mismo tiempo que se anunciaba el hallazgo de ántrax en la cámara, las autoridades informaban que encontraron el buzón de la oficina postal de Nueva Jersey de donde salieron dos cartas con la bacteria que contaminaron a dos empleados postales.

En Shanghai, donde participa en el Foro de Cooperación Económica Asia Pacífico (APEC), el presidente Bush dijo que las autoridades desconocen aún quién envió el bacilo del carbunco al Capitolio o a los diferentes órganos de prensa, pero insistió en que "sabemos que quien envíe deliberadamente el bacilo comete un acto terrorista, un intento odioso de herir a personas inocentes y de aterrorizar a nuestros ciudadanos.

"Estos ataques revelan una vez más lo diabólico del terrorismo... pero derrotaremos a los responsables destruyendo sus redes dondequiera que se encuentren", advirtió.

Los investigadores federales estadunidenses avanzan poco a poco en las pistas de los autores de las cartas contaminadas, pero la única certeza hasta ahora es que las misivas dirigidas al Congreso, a diversos medios de prensa estadunidenses y a otros países, tienen sellos de Estados Unidos.

Hasta ahora, hay ocho casos de personas afectadas por el ántrax, de las cuales una murió, y 36 personas contaminadas.

La histeria continúa

Entre tanto, la histeria continúa tanto en este país como en el mundo luego de que diversas advertencias fueron lanzadas en los últimos días en varios países, donde en muchos casos las autoridades se han visto obligadas a evacuar edificios, dejar sin transporte a cientos de pasajeros y movilizar a equipos antiterroristas.

En América Latina cundía el miedo luego de que en Argentina se confirmó oficialmente que una carta enviada desde Miami contenía la bacteria del ántrax, mientras el gobierno de Brasil respiraba aliviado al confirmarse que no se encontró la bacteria en una carta sospechosa enviada a la corresponsalía del diario estadunidense The New York Times en Río de Janeiro.

El ministro de Salud de Argentina, Héctor Lombardo, dijo que la segunda prueba realizada en el Instituto Malbrán dio positivo tras un primer examen realizado en el hospital Muñiz, donde se había informado de 98 por ciento de posibilidades.

El funcionario dijo que una mujer, a la que no identificó, fue la que recibió la correspondencia en su vivienda de un barrio porteño, pero aseguró que no tiene posibilidades de contraer la enfermedad pues no tuvo contacto con la bacteria.

El gobierno de Argentina, que es el segundo país al que ha llegado el ántrax después de Kenia, intentaba hoy evitar que la población cayera en sicosis mientras se estudiaban medidas de seguridad