Quisiera hallar a los sustitutos de Tin Tan, Cantinflas y Clavillazo: Ernesto Gómez Cruz

Ť El actor, con 40 años de experiencia en 150 películas, se dice olvidado por las televisoras Ť Hay comediantes que no son cómicos, y son muchos; "sólo deseo crear fuentes de trabajo, incluso para mí"

ARTURO CRUZ BARCENAS

Con 40 años de actor, Ernesto Gómez Cruz (Veracruz, 1933) ha participado en 150 películas, 12 obras de teatro y seis telenovelas; se ha hecho acreedor a seis Arieles, seis Diosas de Plata y tres premios internacionales; tiene 14 nietos y seis bisnietos; es viudo; actualmente representa al Comandante en el musical Aventurera; ahora el veterano actor, quien se dice desempleado, olvidado de Televisa, Tv Azteca y Argos, tiene el proyecto de dar clases y de levantar una carpa para dar espacio a jóvenes talentosos en lo artístico. En entrevista, el actor muestra a escala su futuro.

Con segmentos de alambre hizo lo que podría llamarse la estructura de su sueño: la carpa que espera se construya un día no lejano, con una pequeña ayuda de sus amigos, para decirlo a la manera de los Beatles.

Dice que le tocó "lo último" de la carpa. La construcción de tal espacio lo tiene obsesionado. Lanzó una convocatoria en Ventaneando, de Pati Chapoy, formó una compañía de 50 integrantes, que luego de tres meses de ensayos se presentó a los medios. Las cosas no le salieron como esperaba, y ahora ha acudido al Instituto de Cultura de la Ciudad de México para que le facilitaran el Teatro de las Vizcaínas, en el cual presenta un programa desde el 11 de octubre, que hoy concluye.

En el medio artístico pasa lo mismo que en todo el país: hay mucho desempleado. "Este proyecto es una opción para mucha gente, siempre y cuando consigamos los espacios. Eso es lo que nos está deteniendo. Teniendo el sitio para levantarla, Epigmenio (Ibarra) y su gente conseguirán la carpa física. Se me ha sugerido el Parque México, el Teatro Juan Ruiz de Alarcón, terrenos de Coyoacán. Estamos en esa búsqueda del espacio adecuado."

Los precios de los shows serían populares, "muy populares", dijo. "Y así sería la remuneración económica de los elementos que participen."

No todo mundo tiene Internet

?¿No es ahistórico revivir la carpa, que tuvo su momento natural en los treinta y los cincuenta?

?No todo mundo tiene Internet o dinero para ir a un teatro o al cine. Internet es útil si estás en casita, pero la carpa es otra opción. No ignoramos que es otro México y otros tiempos. El país ha crecido, pero la carpa fue la base que nutrió a la televisión y a la radio. Muchos carperos ya se fueron, otros han envejecido. Los cómicos actuales también ya están grandes. Por eso se necesita ir formando a los nuevos cómicos, con nuevos sketches. No que haya comediantes, palabra que me resulta muy fina para lo que pretendo, que es hallar nuevos cómicos, cuyo papá de todos fue Palillo.

"Hay comediantes que no son cómicos, y son muchos. No estoy hablando nada de malo, pero yo quiero encontrar a los sustitutos de aquella generación de la que surgieron Tin Tan, Cantinflas, Clavillazo. Puede existir, a lo mejor me cuesta trabajo. Tal vez no lo logro, pero haré el esfuerzo. Los jóvenes que están participando conmigo no tienen idea de lo que fue la carpa y están haciendo su propuesta. Se ve enseguida que son principiantes, pero les aplauden.

"Hay madera. Lo que pasa es que estamos invadidos de cantantes de ranchero y trato de compensar la falta de un mariachi con pistas de música romántica, de orquesta, piano y guitarra. Andamos escasos de recursos y no podemos contar con una orquesta mínima."

-¿Le falta trabajo o es un proyecto personal de usted?

-Es muy personal. También tuve mi inicio y me costó trabajo enrolarme como actor. Pensando en eso y que tengo una carrera hecha; soy viudo y mis hijos ya se casaron, y tengo el tiempo suficiente para dedicarme a esto.

-¿Tiene usted dinero?

-No, qué va. Tengo para consentirme. Cuando llego a salir de gira con Carmen Salinas, en Aventurera, gano algo y lo reparto entre los muchachos de la compañía, porque lo que deja el público de entrada no alcanza. Tenemos una sonora y procuro darle unos cien pesos a cada uno. Me excluyo, por supuesto. Espero que en 2002 haya algo.

-Ahora hay poco apoyo para proyectos como el de usted...

-Sí, es difícil, pero no imposible. Mientras haya gente que crea en este proyecto, voy a seguir. Nunca pensé que fuera a ser fácil. Me ha costado tiempo, trabajo y dinero. No pretendo hacerme rico, tampoco. Quiero crear una fuente de trabajo, inclusive para mí. Tengo personajes como Don Desiderato, que es un declamador sin maestro, que salió de la época de oro, con Juan Ibáñez, en el Café Colón. Quizá tenga un centro nocturno donde trabaje como Don Desiderato. A los jóvenes sólo hay que encauzarlos.

-¿Está en desventaja un chavo que le gusta actuar, respecto del que estudia en las escuelas?

-Es al revés. Los que salen de las escuelas llegan a la carpa y no saben lo que es eso. Van con sus técnicas y todo, pero no se ubican, porque el trabajo del carpero es espontáneo, fresco. No todos los de los 30 pasaron por la escuela. La familia Soler hizo comedia, teatro en carpa; Sara García, Gloria Marín.. ¡salieron de la carpa! Y no tuvieron escuela de actuación.

Para los que no ubican a don Ernesto Gómez Cruz, vale decirles que es el famoso Azteca de la película Los Caifanes, que no son los del ex grupo roquero de Saúl Hernández, el ahora Jaguar. Tal cinta data de 1966 y fue la primera en la que participó el entrevistado, y le marcó el destino.

De hecho, Gómez Cruz quiso en su juventud ser cantante, allá por los 50 del siglo pasado. En 1955, en Veracruz, lo invitaron a actuar. Quedó envenenado de por vida con el teatro, con la actuación. Debe a Pilar (Pin) Crespo -española que fue esposa de Alejandro Galindo-, entonces directora teatral, la oportunidad de actuar, recomendándolo con Héctor Azar. Obtuvo un papel en Cada noche muere Julieta, de Federico S. Inclán. De ahí pal real. "Con sus altas y bajas, pero aquí estoy."

Para quien quiera apoyar a Ernesto Gómez Cruz, favor de comunicarse a los teléfonos: 5674-4580 o 5524-0632.