Presionan bancos y empresas privatizadas a Duhalde para evitar la pesificación de sus tarifas

¤ La devaluación es un paso peligroso y fuertemente recesivo, alerta el ex ministro Alemann

¤ Evitar una salida drástica de la convertibilidad, el propósito de la ley: Partido Justicialista

AFP, REUTERS Y DPA

Buenos Aires, 5 de enero. La Cámara de Diputados de Argentina comenzó esta tarde a de-batir un proyecto de ley que otorga al Po-der Ejecutivo facultades especiales para modificar la paridad cambiaria y declara la emergencia económica y financiera del país, mientras el secretario de Programación Económica, Jorge Todesca, admitió que la administración está siendo presionada por el sector bancario y las empresas privatizadas para evitar la conversión a pe-sos de sus tarifas.

Jorge Matzkin, miembro informante por el bloque del gubernamental Partido Justicialista, dijo que el propósito de la ley es evitar una salida drástica de la convertibilidad en el país.

"Lo que estamos debatiendo es mucho más que un conjunto de dispositivos jurídicos. Estamos generando los cimientos de un modelo de crecimiento económico, de justicia social y sustentabilidad institucional", afirmó.

El borrador de la ley, redactado por el gobierno de Eduardo Duhalde, deroga la convertibilidad que rige desde 1991, delega en el Poder Ejecutivo la fijación de la política monetaria por un plazo de dos años y autoriza a disponer medidas para disminuir el impacto producido por la modificación de la relación cambiaria para los endeudados en dólares en el sistema financiero.

"Las de servicios públicos son empresas, tienen una estructura de costos, de ingresos y naturalmente pretenden utilidades", señaló Todesca al informar que la mayoría de las compañías que están presionando al gobierno para que modifique el contenido de la ley y así evitar ser perjudicados son de capitales españoles y franceses.

Empero Eduardo Amadeo, el portavoz gubernamental, aseguró que el Ejecutivo no va a aceptar presiones de los diversos sectores y de las empresas privatizadas -que se oponen a la pesificación de sus tarifas- para definir el proyecto de ley de emergencia pública que requiere el país.

Chillidos de los intocables

El funcionario peronista dijo que el presidente Duhalde ha tenido a lo largo de este sábado infinidad de llamadas telefónicas de grupos económicos que han "planteado que no quieren que los toquemos", pero ante es-tas presiones, afirmó, "está claro que no va-mos a ceder".

También el secretario de la presidencia, Aníbal Fernández, sostuvo que existe una postura muy firme del oficialismo respecto de la iniciativa enviada al Congreso.

El secretario de Hacienda, Oscar Lamberto, reconoció de su lado que "seguramente cada lobby va a tratar de defender sus intereses, pero el Estado debe defender los intereses de todos, y fundamentalmente los de los sectores más desprotegidos".

A la defensa que hicieron los funcionarios del gobierno y legisladores respecto del proyecto de ley, se sumó esta día la de la Coordinadora de Actividades Mercantiles, que convocó a las familias argentinas a ma-nifestarse el lunes próximo por la noche en un cacerolazo frente al Congreso para de-fender la ley de emergencia económica.

Pero por otro lado, Lamberto aceptó que la inminente devaluación del peso obligará a imponer una disciplina fiscal de "cara de perro" (despiadada) a fin de no regresar al pasado y evitar el fracaso. La mención al pasado significa que se puede caer en una escalada inflacionaria, desabasto y pérdida del poder adquisitivo de los salarios", dijo.

Vaticinó que después de algunos meses de turbulencias políticas y económicas la situación empezará a normalizarse cuando comience a haber competitividad y mejore el nivel de empleo, pero advirtió que ese proceso no será corto ni rápido.

Todesca, por otra parte, informó que por el momento se mantendrá el límite para extraer dinero en efectivo en bancos impuesto el pasado 3 de diciembre por el gobierno de Fernando de la Rúa, aunque se podría ampliar a cuentas salariales.

Explicó que el llamado corralito financiero sólo se va a poder abrir cuando se recupere la liquidez y baje la incertidumbre.

El vicepresidente del gabinete, Juan Pa-blo Cafiero, del opositor Frente País Solidario, consideró que el plan del presidente Duhalde representa un giro de 180 grados en materia económica, y a la vez opinó que el cambio de modelo es "muy positivo".

Pero no fue considerado así por el ex secretario de Hacienda Juan Alemann, quien advirtió que la devaluación del peso es un "paso sumamente peligroso y fuertemente recesivo".

El ex ministro estimó que lo primero es volver a encarrilar las cosas, tener déficit cero de presupuesto y poner todos los me-canismos de la economía en orden, pero para Cafiero el plan del mandatario es una alianza con el sector productivo, y esto "representa un modelo que favorece la producción, el consumo y el mercado interno".

A todo esto, el diario estadunidense The Washington Post calculó en su edición de este sábado que el peso argentino podría de-valuarse en más de 55 por ciento en caso de que el país no consiga el sustento del Fondo Monetario Internacional (FMI).

De hecho, las autoridades del FMI esperan para los próximos días la posible visita a Washington del ministro de Economía ar-gentino, Jorge Lenicov, para conocer el plan económico que impulsa el presidente Duhalde y con el que busca salvar al país.

Por su parte, el mandatario de Brasil, Fernando Henrique Cardoso, prometió a su par de Argentina que apoyará al nuevo gobierno en las negociaciones en el frente externo, incluso en la búsqueda de ayuda financiera del FMI, informó la prensa brasileña.