¤ A dos minutos del final el Flaco Macías anotó el gol de la igualada para los Zorros

Agónico empate 3-3 de Atlas con Santos Laguna

¤ Los laguneros llegaron a tener ventaja de 2-0 y 3-2 y se vieron alcanzados en la pizarra

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Guadalajara, Jal., 5 de enero. En una lluvia -casi tormenta- de errores, el Atlas evitó a dos minutos del final que el regreso de Enrique Meza al futbol terminara en fracaso, al empatar 3-3 con Santos Laguna en juego de la fecha uno del Torneo de Verano 2002.

Cuando los rojinegros ya se daban por perdidos, tuvo que llegar Alberto Macías, un viejo pupilo del Ojitos Meza, para marcar el agónico gol de la igualada, en una noche plagada de yerros pero también de anotaciones que dejaron satisfechos a los 40 mil aficionados que acudieron al estadio Jalisco.

Tan desordenado como aquella Selección Mexicana de la que Meza fue despedido en junio pasado, el equipo atlista fue un caos en su zona defensiva, mas para su fortuna se encontró con una igualada que a esas alturas del partido ya no estaba en el guión y, de esa forma, corrigió su inicio de campaña.

El equipo de Fernando Quirarte parecía encaminarse a un fácil triunfo con goles de Jared Borgetti a los tres minutos, Héctor Altamirano (28) y Johan Rodríguez (47), pero Atlas regresó primero por conducto de Fernando Salazar (30) y Mario Méndez (43) y, finalmente, con el tanto salvador del Flaco Macías (88).
Ni siquiera había pasado el tiempo necesario para que el público tomara su lugar en el graderío y el Santos ya estaba en ventaja 1-0 a los tres minutos, cuando el chileno Rodrigo Ruiz centró por izquierda a Jared Borgetti, quien sin marca de la desordenada defensiva, conectó de derecha de botepronto para el tempranero gol.
Eso era lo peor que le podía pasar al nuevo equipo de Meza, que la visita no le diera tiempo de acomodarse en la cancha, tomar confianza y familiarizarse entre sí. Lejos de eso, el Atlas desde el principio del torneo debió remar contra la corriente.