Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Domingo 3 de febrero de 2002
  Primera y Contraportada
  Editorial
  Opinión
  Correo Ilustrado
  Política
  Economía
  Cultura
  Espectáculos
  Estados
  Capital
  Mundo
  Sociedad y Justicia
  Deportes
  Lunes en la Ciencia
  Suplementos
  Perfiles
  Fotografía
  Cartones
  La Jornada de Oriente
  Correo Electrónico
  Busquedas
  >

Cultura
Hilvanador de luz, custodio de imágenes

MERRY MAC MASTERS

Manuel Alvarez Bravo, ojo atento y sensible, parece sorprenderse cuando se percata de que también es centro de atención: "¿qué no van a ver la exposición? Vine a ver fotografías, no a ser fotografiado".

Era la inauguración de la muestra Homenaje a Breton, organizada por el Centro de la Imagen en 1996, de la cual fue protagonista con Kati Horna. "Como soy fotógrafo resulta que uno piensa: entre fotógrafos te veas".

En aquella ocasión habló del futuro de la fotografía como arte: ''¿El futuro? Pues el futuro se está viendo ahora. El futuro es el continuo salir de nuevos fotógrafos, de nuevos grandes artistas''.

escalaAconsejó a las nuevas generaciones: "El fotógrafo que dedica su vida a este oficio debe estar en él continuamente, pero rodeado de o adquiriendo de las diversas artes, alimento para expresar lo que él en sí tiene''.

¿La fotografía actual? ''No tengo un sentido crítico. Lo que he visto son expresiones buenas o malas, como sea, pero que tiene derecho todo artista a expresarlas".

Al año siguiente, a raíz de su exposición Variaciones 1995-1997, Alvarez Bravo admitió en el mismo foro que una vez pretendió dejar de fotografiar, pero no pudo: ''¿Usted podría dejar de dormir, comer, caminar, bañar y vestirse, de todo lo normal que es la vida? Sacar fotos es absolutamente así de normal para un fotógrafo".

Don Manuel, entonces de 95 años, había insistido en que la muestra se integrara con obra reciente. Abordar su novel producción significaba hablar de "los sistemas nuevos que se han puesto al alcance de los fotógrafos, con todos los automatismos que dan la posibilidad de una inmediatez en la relación del fotógrafo con la realidad".

El maestro se había actualizado: "Con las becas (en el 93 fue designado creador emérito por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes) adquirí las últimas cámaras; estudiándolas, trabajando, se produjo lo que ustedes ven".

¿Sus temas? "Mira, tengo la cámara conmigo. Salgo. Entonces los temas me los da lo que veo... El Telleman decía a sus discípulos que un músico debe estar siempre silbando. El fotógrafo debe estar siempre viendo algo".

¿La nostalgia? "La cuestión es realizar, ¿no? Trabajar, realizar".

El coleccionista

De 1980 a 1986 Alvarez Bravo organizó para la Fundación Cultural Televisa el Museo de Fotografía (Cedros 66, ahora bulevar Adolfo López Mateos), cuya colección de mil 67 piezas, pertenecientes a 269 artistas, quedó "inconclusa" cuando don Manuel "decidió que tenía que continuar con su trabajo" personal.

Desde 1960 empezó a coleccionar grabado europeo. En 1998 mostró parte de su colección al público. Al asistir a la preinauguración, en el Museo Soumaya, de su acervo de estampa europea de los siglos XV y XVI, que reunía 103 calcografías, xilografías y aguafuertes de los más de 500 trabajos que integran la colección, dejó muy claro que no tenía la intención de donar el conjunto a ninguna institución: "Esta colección no sale de Coyoacán", donde vive desde 1962.

Hace poco más de un año, a raíz de la apertura de una sala con su nombre en el Museo de Arte Moderno --en 1973 donó un acervo fotográfico compuesto de 400 imágenes de su autoría y de otros artistas--, don Manuel habló de su fascinación por la imagen. Aparte de captarla, la colecciona desde que tiene "uso de la razón".

De niño acudía los domingos al antiguo mercado de El Volador, a unos pasos de su hogar en las calles ahora de Guatemala, a espaldas de la Catedral Metropolitana. Entre la mercancía de los puestos empezó a comprar fotografías en formato carte-de-visite, que le llamaron la atención "por lo que representaban y cómo lo hacían. Había unos muy bonitos y de muy buenos autores mexicanos, aunque eventualmente algún extranjero".

En aquella ocasión La Jornada le preguntó si todavía hacía falta un museo de fotografía en México: "Creo que sí. Hacen falta muchos museos; hay pocos. Aquí en Coyoacán, por ejemplo, debería haber más. Los museos son una cosa muy importante en la vida de la ciudad y de las personas. Pero eso se descuida. Son importantes y necesarios los impulsos para coleccionar, para enseñar, para guardar, para ver. Imagine usted París o Madrid o cualquier capital: los museos que tienen son maravillosos. Todas las cosas se prestan para hacer un museo, para que no se pierdan".

Es don Manuel, cazador de imágenes acompañado "siempre, siempre" de una cámara, y siempre, siempre atento al mundo que lo rodea.

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
Día Mes Año