La iniciativa atenta contra fuerzas emergentes: CD

Se oponen partidos minoritarios a que se les reduzcan recursos

Sólo se busca fortalecer a PRI, PRD y PAN, dice senador

ANDREA BECERRIL

Comenzaron las reacciones de los partidos pequeños en contra de la reforma electoral presentada conjuntamente por PRI, PAN y PRD para reducir el financiamiento a los organismos políticos y evitar que aquellos sin representatividad accedan a los recursos públicos. El senador de Convergencia por la Democracia, Guillermo Herrera, sostuvo que es un proyecto que atenta contra las fuerzas emergentes.

"En todo caso que no haya recursos para ningún partido", propuso Herrera, quien acaba de asumir su responsabilidad legislativa, toda que vez que el anterior periodo de sesiones tuvo el escaño Armando Méndez de la Luz. Esto es parte de un acuerdo para que ambos se rolen la única senaduría que tiene Convergencia por la Democracia.

En sus primeras declaraciones, se manifestó totalmente en contra de las iniciativas presentada el lunes pasado por PRI, PAN y PRD, la cual incluye reducir de 2 a 1 por ciento el porcentaje del financiamiento para la chiquillada, como se llama a los partidos pequeños en el medio político.

Sostuvo que la intención es fortalecer a esos tres principales partidos, "en vez de abrirnos a una pluralidad política", pues si la reforma electoral se aprueba "Convergencia por la Democracia se vería afectado considerablemente". Propuso que mejor se acabe el financiamiento público para todos los partidos o, en su caso "se encuentre una mejor forma de reducir la bolsa de gastos, o las erogaciones para las campañas".

Igualmente, agregó Herrera, se podrían recalendarizar los procesos electorales, toda vez que en ocasiones hay 72 elecciones locales cada año. "Si hiciéramos un ejercicio para modificar de fondo la Constitución federal y las locales, así como los códigos electorales, podríamos quedar en cuatro procesos electorales cada cuatro años".

Ese es el planteamiento que harán, además de que los consejeros del IFE participen en la discusión de la reforma electoral presentada al Senado, con el propósito de evitar que disminuya el financiamiento.