Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 13 de junio de 2002
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Espectáculos

El líder de la banda, David Summers, cantó Hace un año después de tres lustros

En el Auditorio Nacional, con los Hombres G, todos se la pasaron "de puta madre"

hombres gAyer eran estudiantes púberes y hoy jóvenes ejecutivos o burócratas que visten de traje se soltaron el pelo la noche del martes para degustar dos horas de concierto del rencuentro de los Hombres G y un preludio acústico del órgano monumental del Auditorio Nacional.

Tras 10 años de separación, la cuarteta de músicos ibéricos se encontró con un México diferente, un país que los ha vuelto personajes de culto popular porque miles de sus fans permanecían inactivos hasta que se dieron cita para recibir, cantar y emitir incesantes gritos a lo largo de las 26 piezas musicales interpretadas en este primer concierto de cuatro que ofrecieron en esta ciudad.

Una década de ausencia hizo que las letras forever young de los Hombres G acrecentaran su audiencia. Se les han sumado niños, jóvenes y adultos en plenitud, quienes conformaron el público de sus conciertos para recordar las canciones antaño irreverentes y escatológicas de quienes representaron parte del boom del pop ibérico de finales de los años ochenta.

Un cielo que se tiñó de gris y la lluvia que cayó momentos antes de la presentación se sumaron a los festejos del rencuentro de los españoles David Summers (vocalista), Dany Mezquita y Rafa Gutiérrez (guitarristas), y Javi Molina (baterista), que no aguantaron la presión que ejercía el respetable y antes de iniciar su presentación salieron al escenario para agradecer las explosivas ovaciones y el cálido recibimiento hacia sus personas.

La ensordecedora recepción en todo momento fue in crecendo, tras los primeros acordes de la rola La cagaste Burt Lancaster. El ambiente se prendió aún más cuando el vocalista anunció lo que prevalecería en el resto del concierto: "Todos se la pasarán de puta madre".

El ataque de las chicas cocodrilo, la segunda del programa

Brincos, gritos y lábaros peninsulares salieron a flote con la segunda y tercera del programa, El ataque de las chicas cocodrilo y Mujer de bandera. En este punto fue notoria la diferencia entre grupos musicales de culto que también se han presentado en el Auditorio Nacional y artistas populares como los Hombres G: sólo algunos de los primeros llenan los recintos donde se presentan, mientras que los segundos abarrotan los foros.

Coreografías simples y letras pegajosas propiciaron que la mayoría de los presentes dejara salir al hombre G que lleva dentro. Ello aunado a que la calidad auditiva del grupo se fortaleció con su presentación sin pistas y el acompañamiento de piano, saxo, trombo y trompeta.

En reciprocidad al fervor de los mexicanos, los Hombres G interpretaron especialmente La carretera, México y Hace un año, la cual David Summers reconoció que tenía tres lustros de no cantarla en público.

Del rocanrol Suéltate el pelo a las baladas Si yo no te tengo a ti, En mi coche, Un par de palabras, Nassau y otras, fue la presentación alegre y romántica de los españoles, que miles de parejas aprovecharon para hacer de la velada un viaje de recuerdos a viejos amores y anécdotas estudiantiles de bachillerato y universidad.

La presentación no podía terminar sin incluir los temas Indiana, Visite nuestro bar, Martha tiene un marcapasos, No te puedo besar, Venezia y la solicitadísima Devuélveme a mi chica.

GABRIEL LEON ZARAGOZA

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