Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Martes 16 de julio de 2002
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Estados

Pobladores de Celestún los encarcelaron por "invadir" territorio, afirma alcalde

Toman como rehenes a 3 marinos para exigir libertad de 9 pescadores yucatecos

Lo primordial es solucionar las cosas con calma, señala el contralmirante Pedro Salmerón

LUIS A BOFFIL GOMEZ CORRESPONSAL

Merida, Yuc., 15 de julio. Un grupo de pobladores de Celestún tomó hoy como rehenes a tres elementos de la Armada de México, provenientes de Lerma, Campeche, y amenazó con lincharlos a menos que el gobierno de la vecina entidad libere a nueve pescadores yucatecos recluidos en el penal de Kobén desde hace dos meses.

En respuesta, un convoy con al menos 40 marinos armados puso un ultimátum a los celestunenses para dejar en libertad a sus compañeros o de lo contrario utilizarían la fuerza. Hasta las 20 horas la situación era tensa. Al parecer, la Armada recibió órdenes de "aguantar" hasta que el gobierno de Yucatán logre alguna solución.

Personal del grupo de Reacción Inmediata arribó al puerto a bordo de cuatro camionetas. Estos efectivos han sido entrenados por militares israelíes en los últimos seis años y conocen tácticas paramilitares y de rescate de rehenes.

El secuestro de los navegantes Alberto Gallardo Pérez, Manuel González López y Manuel Kiap Poot, ocurrió a las 12:30 horas en la comunidad costera de Celestún (100 kilómetros al sureste de Mérida y colindante con Isla Arena, Campeche), cuando presuntamente "invadieron" territorio yucateco, según la versión del alcalde José Luis Peña Chac.

El edil de Celestún expuso que los marinos fueron detenidos cuando, en la lancha matrícula AMZG-7011-BKRAFT, incursionaron en el área natural protegida de los flamencos y destruyeron manglares. Cuando desembarcaron en la ciénaga, un grupo de pescadores les recriminó y procedieron a detenerlos, no sin antes decomisarles una ametralladora Uzi y tres pistolas tipo escuadra.

De inmediato fueron llevados al palacio municipal y encarcelados. Poco después, en la plaza principal de Celestún, pobladores exigiron intercambiar a los tres rehenes por los nueve pescadores locales procesados desde mayo pasado en el penal de Kobén, Campeche.

Por la tarde, el Ejecutivo yucateco emitió un comunicado en el que el secretario general de Gobierno, Pedro Rivas Gutiérrez, calificó de "incorrecta" la actitud asumida por los pescadores al retener de manera ilegal a los tres oficiales. Al mismo tiempo pidió a pobladores de Celestún recapacitar y dejarlos en libertad para tramitar pacíficamente la solución al problema.

Rivas Gutiérrez informó que el secretario de Desarrollo Social, Xavier Abreu Sierra, y el director de Desarrollo Municipal, Orlando Pérez Moguel, fueron designados mediadores.

Ambos funcionarios, de acuerdo con el edil Peña Chac, no ha-bían podido llegar a un acuerdo satisfactorio con los pobladores, entre ellos familiares de los detenidos en Kobén, para liberar a los tres soldados. "La gente de Celestún quiere de vuelta a sus pescadores y no cederá ante las presiones de las autoridades", dijo.

En la plaza de esa población, los pescadores recriminaron a los enviados que "el gobierno de Patricio Patrón Laviada no les da apoyo". Los celestunenses solicitaron la intervención de funcionarios federales que garanticen la libertad de los pescadores yucatecos a cambio de la de los tres oficiales.

De igual forma, el contralmirante Pedro Salmerón Ortiz, jefe de la base naval del puerto de abrigo de Yucalpetén, Yucatán, intentó entrevistarse con los detenidos, pero los pobladores lo impidieron. En entrevista, añadió que lo primordial es tratar de solucionar las cosas con calma y afirmó que la Armada de México no tiene la intención de agredir a civiles.

Explicó que la presencia de los tres elementos en Celestún es legal porque el puerto yucateco está bajo la jurisdicción de la zona naval de Lerma, Campeche, y no de Yucalpetén. "La detención es ilegal y se considera un secuestro", aseveró.

En tanto, el destacamento de Antimotines de la Secretaría de Protección y permanecía con unos 300 elementos armados en distintos sitios de Celestún en prevención de cualquier hecho violento.

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