Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Miércoles 31 de julio de 2002
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Política

Admite que el gobierno no tiene dinero para resolverlo

Un problemón, el de la tierra en zonas indígenas: Gálvez

La autoridad anterior dividió a pueblos, expone a ONG

VICTOR BALLINAS

La titular de la Oficina de la Presidencia para la Atención de los Pueblos Indígenas, Xóchitl Gálvez, reconoció ante la Comisión Civil Internacional de Observación por los Derechos Humanos (CCIODH) que el asunto de la tierra en las comunidades indias "es un problemón, muy grave", y lo que se debe hacer para resolverlo "es que el gobierno compre tierras y se las provea, pero son miles de millones de pesos que la autoridad no tiene".

Lo anterior se destaca en el tercer Informe de la Comisión Civil Internacional de Observación por los Derechos Humanos en México, que ayer se presentó, y en el cual se transcriben las entrevistas que los miembros de la ONG sostuvieron con funcionarios de la Secretaría de Gobernación, de la Procuraduría General de la República, de la Comisión Nacional de Derechos Humanos y de la oficina encabezada por Gálvez, entre otras.

En el informe de casi 500 páginas resalta la entrevista que Gálvez concedió a la CCIODH en marzo pasado. Ahí, la funcionaria señala que la estrategia del gobierno anterior (priísta) fue dividir a las comunidades y a los pueblos indígenas para controlarlos.

"Hay infinidad de juicios abiertos para decir a quién le corresponde la tierra. Hay alguna que en el pasado le fue dada a tres grupos distintos. Unos reclaman que es ejido, otros que es colectivo. Eso no va a resolver nada; lo que se tiene que empezar a trabajar es un programa de conciliación comunitaria. Gran parte de la estrategia del pasado fue dividir a los pueblos indígenas. El tema agrario es quizá el tema más grave de esos pueblos."

Al ser interrogada por la ONG en el sentido de que ese programa de conciliación no sería el adecuado, Gálvez destaca: "Puede ser que el instrumento no sea el adecuado, puede ser que primero busques la conciliación, a lo mejor esa tierra sí le corresponde a las familias que están inscritas ya en el Programa de Certificación de Derechos; es un problemón, es grave. Lo que tenemos que hacer es que el gobierno compre las tierras en otro lado y proveérselas... pero son miles de millones de pesos que el gobierno no tiene".

Cuando se le solicitó su opinión sobre programas como Progresa, Procampo y Contigo, entre otros, la funcionaria de la Presidencia destacó que se iniciaron en el pasado. "Un gobierno no puede llegar y quitar todo, porque las familias finalmente esperan su Progresa. Yo no soy de la idea de tener esos programas, porque son paternalistas. Hay ahí una relación perversa, tanto del gobierno federal como de los pueblos indígenas.

"Una es de la autoconsideración (dependencia) de los indios hacia el gobierno: 'yo soy pobre, soy indio, tú me tienes que ayudar'. šHay mucho de eso, mucho! Y hay otra del gobiernos hacia los indios: 'yo te tengo controlado, porque te doy para comer, para tus hijos'."

Sobre la reforma constitucional en materia indígena, Gálvez sostiene su posición de que dichas modificaciones no resuelven el problema de fondo. "Hay avances, pero quedan aspectos como la asociación entre municipios que no quedan definidos", expone.

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