La Guía de padres, moderada, dice líder del SNTE

Busca que los niños lleguen a ser adultos "responsables, satisfechos, amorosos y felices"

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

La Guía de padres que distribuirán el sindicato magisterial y la fundación Vamos México, que encabeza Marta Sahagún de Fox, aconseja a los padres de familia que formen niños que lleguen a ser adultos "responsables, satisfechos, amorosos y felices", e incluye un breve capítulo sobre sexualidad infantil.

Para el secretario regional del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Miguel Alonso Raya, la versión del libro que ha circulado entre los integrantes del Comité Ejecutivo Nacional tiene un "tufillo de conservadurismo", sobre todo cuando aborda los temas de sexualidad y de enseñanza de valores.

Sin embargo, consideró que los foxistas tuvieron ahora mayor cuidado en no incluir abiertamente los principios del catolicismo, como cuando Vicente Fox fue gobernador de Guanajuato y editó el controvertido folleto Así educa Guanajuato, que aconsejaba aplicar castigos a los alumnos, y la enseñanza de valores religiosos.

Esta guía no es la primera publicación dirigida a padres de familia. En el último año de la presidencia de Ernesto Zedillo, la Secretaría de Educación Pública editó una serie de cuatro libros dirigidos a este sector referentes a sexualidad infantil, violencia intrafamiliar, el amor en la familia y prevención de las adicciones.

De acuerdo con el proyecto del libro, que consta de 127 páginas, los padres de familia pueden aprender los aspectos de la personalidad del niño en tres apartados: Aprender a vivir juntos, Aprender a conoce y a hacer y Aprender a ser.

Las diferencias hacen más interesante  y completa la vida de todos

El capítulo "Educación de la sexualidad" se enfoca a la situación de los niños de prescolar. Explica que educación sexual "significa ayudar al niño a ser consciente del sexo al que pertenece y a sentirse satisfecho con él; a que sepa que niños y niñas son igualmente valiosos como seres humanos y que sus diferencias hacen más interesante y completa la vida de todos".

Uno de los tema que aborda es el de la masturbación. Explica que al niño le produce placer la estimulación de sus genitales y por ello este acto es parte natural en el desarrollo sexual infantil y no provoca ningún problema en la vida adulta.

Sobre este punto aconseja: "Cuando sorprendamos a nuestro hijo tocándose los genitales no debemos regañarlo ni castigarlo, pues esto podría hacerlo asociar la sexualidad con algo malo o sucio. Simplemente tratemos de hacerle entender que esos son actos íntimos, muy personales, y que no debe realizarlos frente a otras personas".

Aunque aclara que cuando la masturbación es algo tan frecuente que impida al niño jugar y realizar otras actividades, o cuando se note que el niño está ansioso o angustiado, es conveniente analizar qué le está pasando y, si es necesario, pedir ayuda a un profesional.

Aconseja a los padres de familia que no se alarmen si sorprenden a su hijo en jugueteos sexuales con sus hermanos o amigos, ya que corresponde a un proceso de curiosidad natural. Sin embargo, recomienda que estos juegos no deben darse entre niños cuya diferencia de edad sea mayor a dos años.

Cuando se dé información sexual al niño, sugiere que lo conveniente es hacerlo con brevedad y sencillez para que él sea capaz de entenderla y asimilarla. El argumento es que "a los niños se les olvida lo que no están preparados para entender".

Señala que es necesario modificar las costumbres machistas y que para eso se requiere valor. "El padre tiene que sentirse seguro de que seguirá siendo igual de hombre si juega con su bebé o le da de comer, y la madre tiene que aceptar que el cuidado de los hijos y de la casa no es su territorio exclusivo".

Al principio incluye notas y advertencias sobre la interpretación de los conceptos de género, familia y realidad. Por ejemplo, aclara que cuando se habla de familia no se refiere al concepto tradicional de la misma, sino a las que pueden integrarse de una mamá y un hijo; un papá, una tía y una hija; una abuela y una nieta; un papá, una mamá y varios hijos; una pareja con hijas o hijos adoptados; una pareja sin hijos, etcétera.

Dice que los ideales deben orientar los pasos y dar fuerza a los padres de familia para seguir luchando. "O nos dejamos vencer por las circunstancias o bien mantenemos en la mente y el corazón nuestros anhelos y aprovechamos los obstáculos para crecer y para dar a nuestros hijos un ejemplo de valentía, de esperanza y amor", afirma el libro.