miércoles 21 de agosto de 2002
La Jornada de Oriente publicación para Puebla y Tlaxcala México

 
Visiones

Arte Joven en su XXII versión

n César Gordillo Aguilar

Los cambios que se vivieron en el arte contemporáneo a partir de las propuestas de Duchamp o Beuys condujeron durante la segunda mitad del siglo XX a la reconsideración de conceptos como objeto, materia, soporte o imagen dentro del arte. La creciente experimentación en materiales, técnicas y medios condujo a una revolución en la forma en que se construye el arte contemporáneo, desde el cuestionamiento de superficies y soportes tradicionales, como el pictórico o el escultórico, hasta llegar a la revolución de lo que se ha llamado "nuevos soportes" y "medios alternativos".
Durante mucho tiempo los soportes y medios alternativos fueron el signo más importante de la contemporaneidad de una obra, y el simple hecho de la utilización de los nuevos "lienzos electrónicos" se convirtió en referente obligado para un artista que quisiera poder ser designado como "propositivo y vanguardista". Ya hacia la última década del siglo XX, diversos teóricos alertaron frente al peligro de esta sobrevaloración de los medios alternos y de diversas maneras cuestionaron su contemporaneidad a priori, anotando que "...también en soportes y medios alternativos se puede realizar obra retrógrada o reaccionaria".
Recientemente, en los centros artísticos mundiales como Nueva York, París o Londres, se habla de la revaloración de conceptos como lo sublime o lo bello y se ha revalorado la pintura, la escultura o la gráfica como medios donde es perfectamente posible construir nuevas propuestas en las que incluso la connotación histórica del soporte, la factura o la técnica son determinantes en el concepto mismo de la obra: la obra del artista mexicano Daniel Lezama, construida en un estilo pictórico decimonónico con temas y conceptos cotidianos y actuales, es un ejemplo claro de esto.
La recientemente inaugurada exposición del XXII Encuentro Nacional de Arte Joven, presentada dentro de la galería del Centro de Investigación Académica de la Universidad Iberoamericana Golfo Centro, con selecciones del XXII Encuentro Nacional de Arte Joven, puede ser un ejemplo claro de la capacidad significante que los medios tradicionales pueden tener en el contexto de la expresión de temáticas tan contemporáneas como el cuerpo, el tiempo, el espacio, la identidad que son recurrentes en las obras que integran esta exposición.
Desde pintura al óleo en el más puro estilo académico, hasta una instalación desarrollada con materiales de desecho que nos habla de las formas e implicaciones del habitar y construir la ciudad en los asentamientos espontáneos, todo esto pasando por medios como la gráfica digital, o la fotografía tratadas ya con una mayor conciencia de la necesidad de crear nuevas formas de afrontar la producción plástica en estos medios, constituyen una muestra que en conjunto podría considerarse como una de las mejores selecciones de este Encuentro Nacional de Arte Joven que arriba ya a su versión XXII.
Piezas de una calidad conceptual, técnica y estética realmente notable como el políptico de Jonatan Olvera En la esquina del espacio tiempo, donde el autor reflexiona sobre estos conceptos y su modo de presentación y representación en el soporte pictórico, o la obra de Daniel Ruoanova, Icono, que en una obra pictórica, utilizando un modo de representación propio de los medios electrónicos (pixeleo) y abordando temas contemporáneos como la violencia nos presenta una obra que en su entretejido significante no sólo recurre al medio como una respuesta a un dominio técnico o a un gusto personal, sino que lo carga de simbolismo en ese entrecruce de significados y significantes que considero que es en lo cual se debería de convertir la obra de arte contemporánea.
Viejos soportes y medios para nuevas ideas, así como nuevas maneras de conceptualizar viejas y nuevas ideas sobre "soportes alternativos" que entran en un proceso de falta de la espectacularidad y la novedad que en otro tiempo lo legitimaron son nuevas tareas que el arte contemporáneo tendrá que resolver.