La decisión de parar, unilateral, afirman
Rechazan líderes seccionales la suspensión
de labores; se expone a trabajadores, dicen
ELIA BALTAZAR
Los secretarios generales de las secciones 23, 25 y 28
del Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal (SUTGDF),
encabezados por el vicepresidente de capacitación del comité
ejecutivo, Emilio Fernández, se deslindaron ayer del paro general
previsto para el martes próximo, ya que es "una provocación"
y "una acción aventurera" que pone en riesgo a los trabajadores
al exponerlos a un enfrentamiento.
En conferencia de prensa aseguraron que en esa acción
no participará la mayoría de trabajadores de base, pues al
menos 30 secciones, de las 40 que integran ese gremio, están en
contra de suspender labores. "Calculamos que a la fecha son más
de 50 mil trabajadores, de los 130 mil que integran el SUTGDF, que se opondrán
al paro".
Pero
serán más en los próximos días y "estamos seguros
de que al menos 90 por ciento de los compañeros no participará
en esa acción, aseguró Fernández, quien expuso que
un documento con los firmas de los líderes de 13 secciones, entre
ellas las más numerosas, como la uno, limpia; seis, bosques, parques
y jardines, y las cinco que agrupan a los empleados de Finanzas, tampoco
responderán a la convocatoria.
Advirtió que quienes han decidido emprender el
paro son dirigentes de nueve o 10 secciones, en los que se apoya el presidente
del Sindicato Unico de Trabajadores del Gobierno del Distrito Federal,
José Medel. "Pero nosotros no le vamos a entrar, no vamos a exponer
a nuestros compañeros a ningún riesgo político, ya
que habrá policías en las calles, organizaciones sociales
que defenderán al gobierno y lo que se pretende no es otra cosa
que llevar a la gente a un enfrentamiento", advirtió.
Dijo: "Impusieron la decisión sin el consenso de
la mayoría de los secretarios generales, pues la del jueves fue
una reunión de trabajo sin carácter vinculatorio. De ninguna
manera se trató de un consejo general de delegados, que es el único
órgano con facultades para decidir este tipo de acciones", explicó
Fernández.
Los dirigentes anunciaron que llevarán adelante
una serie de asambleas en los comités seccionales, para convencerlos
sobre la necesidad de cambio, pues "padecemos del desprestigio frente a
los ciudadanos, sobre todo después del rotundo fracaso del paro
del 28 de mayo pasado".
Aunque Fernández no quiso otorgar la razón
al jefe de Gobierno, Andrés Manuel López Obrador, que ha
denunciado intereses políticos detrás del conflicto, sí
advirtió que los dirigentes del SUTGDF sólo están
detrás de los puestos de elección para los comicios de 2003.
Inconformidad en el STC
También trabajadores del Metro se expresaron ayer
en contra del paro en este medio de transporte, convocado por el dirigente
sindical y legislador priísta Fernando Espino Arévalo, a
quien acusaron de abrogarse el derecho de representación de todos
los empleados, cuando hay otras cuatro representaciones gremiales independientes.
Advirtieron sobre la posibilidad de actos de sabotaje
a las instalaciones, pues no sería la primera vez que los grupos
identificados con Espino recurrieran a ese tipo de acciones para obtener
beneficios.
"Ellos, por ejemplo, son los que dañan y rayan
los cristales de los trenes para obligar a la administración a contratar
a empresas cercanas a la dirigencia sindical del Metro, como las de limpieza",
explicó.
Por su parte, José Antonio Rojas, secretario general
de la Alianza Sindical de Trabajadores del Metro, que agrupa a 3 mil 500
profesionistas y técnicos que ocupan los puestos de confianza del
organismo, aseguró que cuentan con un plan de contingencia del cual
están enterados las autoridades desde hace un mes y que permitiría
prestar el servicio en las diez líneas, "si bien no al ciento por
ciento, por lo menos se impediría el caos".
"Nosotros estamos dispuestos a trabajar siempre y cuando
la dirección del STC-Metro nos ofrezca garantías para que
el personal de confianza pueda hacerse cargo del servicio".
