Plantean que se forme una gran mesa de negociación que incluya a sindicatos y partidos
La autonomía sindical, ausente en la propuesta de reforma laboral de Abascal, señalan especialistas
CIRO PEREZ SILVA
Legisladores y especialistas en materia laboral nacionales y extranjeros advirtieron sobre la necesidad de que cualquier reforma a la ley del trabajo que pretenda el gobierno foxista no lesione los intereses de los trabajadores.
"México requiere de una reforma laboral que refleje el proceso de transformación democrática que se vive actualmente, y es imposible esperar a que el gobierno y el secretario del Trabajo, Carlos Abascal, realicen y concreten sus propios proyectos en la materia", afirmó el diputado perredista Víctor Manuel Ochoa Camposeco al participar en el foro Análisis del proyecto Abascal de reforma a la Ley Federal del Trabajo, que se efectuó en la Cámara de Diputados.
De acuerdo con el legislador perredista, más que una respuesta a los intereses del sector empresarial o de algunos funcionarios, dicha reforma debe responder a las aspiraciones de los trabajadores. Por ello se manifestó porque los partidos representados en la Cámara de Diputados adopten y mejoren el proyecto laboral presentado por la Unión Nacional de Trabajadores.
A su vez, la doctora María del Carmen Agut García, profesora de derecho del trabajo y de la seguridad social en la Universidad de Castellón, España, mencionó que ese país, junto con Italia, ha planteado una reforma laboral basada en el derecho individual, y ninguno de los dos países ha desarrollado una propuesta que altere la estructura de los sindicatos ni la organización en bloque de su organización colectiva.
Sin embargo, ambos países están condicionados por los acuerdos y tratados de la Unión Europea, y en España la contratación indefinida y temporal justificada son las que orientan la estabilidad. Así, el fortalecimiento de los sindicatos, empresarios y el Estado permitió que las empresas españolas superaran la crisis y fueran competitivas, indicó.
En su oportunidad, el doctor Alfredo Sánchez Castañeda, especialista en derecho laboral, expresó que el proyecto Abascal no considera el sindicalismo corporativo ni toma en cuenta que hay una crisis sindical mexicana. De igual manera, consideró, el tema de la democracia, pluralismo y autonomía sindical están ausentes en su propuesta de reforma.
"La reforma no debe ser politizada ni sectorizada; por el contrario, para no generar proyectos partidistas debe formarse una gran mesa de negociación que convoque a especialistas en la materia, sindicatos y partidos políticos, así como enfrentar la actual globalización laboral", dijo.
La doctora María del Carmen Macías, del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM, enfatizó que la figura del contrato a prueba, propuesta del gobierno federal, debilita la estabilidad laboral y los derechos sociales de los trabajadores mexicanos. "El proyecto Abascal pretende acabar con la actual Ley Federal del Trabajo, que es una ley protectora de los derechos de los trabajadores", concluyó.