Gracias a los programas telebasura es
posible financiar otro tipo de proyectos: Simon Fuller
Coexisten en Canal 4 de Inglaterra comercialización
y tv educativa
La alianza non sancta entre la BBC y Robert Murdoch
amenaza para el medio en ese país, asegura en entrevista el productor
Participó en el Congreso de Imagen y Pedagogía, efectuado
en Mazatlán
JENARO VILLAMIL
En la madrugada del 20 de noviembre el Canal 4 de la televisión
británica cimbró las pantallas europeas con la transmisión
en vivo de la disección de un cadáver. La autopsia, realizada
por el profesor y artista alemán Günter von Hughes se convirtió
en la primera que se transmitió en vivo y fuera de un hospital en
Gran Bretaña. Además, generó una amplia polémica
entre expertos: algunos lo consideraron morbo, otros arte y muchos una
simple tomadura de pelo.
"Ha sido un espectáculo, no un acto educativo",
declaró el presidente de los médicos británicos, mientras
otros televidentes lo consideraron como "sorprendente" y "hermoso", de
acuerdo con el reporte del periódico español El País.
Como esta polémica producción, otras que
se transmiten en Canal 4, la segunda cadena británica después
de la legendaria BBC, hablan de una "constante tensión" entre la
comercialización y el servicio público en la pantalla europea.
El productor de este canal, Simon Fuller, considera que gracias a este
tipo de programas calificados por algunos de telebasura es posible
financiar otros proyectos de corte educativo.
Entrevistado en México, después de su participación
en el segundo Congreso de Imagen y Pedagogía, realizado en Mazatlán,
Fuller señala que la gran amenaza para la televisión en su
país constituye la "alianza non sancta entre la BBC y Robert
Murdoch", el magnate australiano que es dueño de la Fox y de decenas
de consorcios mediáticos globales. "Tratan de tener el completo
control del futuro digital", que se anuncia como el gran cambio tecnológico
en los medios televisivos.
Entre series para aprender y reality shows
Canal 4 se ha caracterizado por sus programas educativos,
dentro del segmento "el canal para aprender", pero también por sus
polémicos reality shows, por la transmisión de la
versión británica de Big Brother, algunas emisiones
de corte sensacionalista y, sobre todo, por tener un trato distinto con
los productores independientes. Según Fuller, al año esta
estación le compra distintos proyectos a un promedio de 20 productores
independientes.
Fuller explica que gracias a los programas con gran audiencia,
Canal 4 -surgido en la época de "la venerable" Margaret Thatcher,
acérrima enemiga de la BBC- ha podido financiar producciones y sus
dos canales digitales: Film Four y E4.
Durante su exposición en el congreso que organizó
la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el gobierno
de Sinaloa, Fuller concentró la atención de los pedagogos
en algunos programas creativos como El crucero de las matemáticas,
para enseñar a niños de seis a nueve años esa
ciencia; Handmade, producción sobre manualidades; el programa
Macbeth, que introduce a los adolescentes en el mundo shakespereano,
o Rewind, programa sobre música contemporánea para
jóvenes de 14 a 16 años. En ellos no existen estrellas juveniles,
sino imágenes digitalizadas, producidas en forma muy creativa para
generar interés por la música de concierto, para promover
materiales de apoyo, incrementar la motivación y buscar un aprendizaje
más autónomo. Por supuesto, todos estos programas son transmitidos
en la barra matutina, de menor rating que la nocturna.
Importante tomar riesgos
Después de su exposición, Fuller fue entrevistado
por La Jornada. Insistió en la importancia de "tomar riesgos",
ser innovadores y generar los suficientes recursos para financiar los proyectos
independientes.
-¿Se guían por el rating?
-Lo que hace la mayor parte, el proyecto que viste hoy
fue generado por los fondos que se derivan de exhibir otro tipo de programas
comerciales. Por tanto, mientras más televidentes existan, se genera
más dinero y se apoyan estos proyectos.
-¿Existe una dependencia hacia las pautas de comercialización?
-Siempre hay una tensión, por supuesto, entre el
servicio público y los contenidos comerciales. Es imposible, a las
ocho de la noche, tener un programa educativo. Sí, hay problemas,
pero podemos convivir sin ninguna dificultad.
-¿Cómo se incorpora a los productores independientes
a los proyectos de Canal 4?
-Tenemos el medio y el dinero y, además, administramos
los sitios web. Cada uno de esos sitios que existen hoy se hacen
por distintas compañías. Escojo, de acuerdo con los proyectos,
qué compañía es la que puede trabajar mejor de acuerdo
con el proyecto.
-¿Cuántas personas colaboran en el canal?
-Veinte compañías por año, en webside
entre 12 y 20. Son todas privadas, algunas son totalmente independientes.
Muchas son de dos personas o hasta de 50.
-¿Incluyen a productores universitarios?
-Sí, sobre todo, para que nos asesoren. Trabajamos
muy cercanos a universidades que estén desarrollando proyectos como
los del túnel de la ciencia.
-¿Cómo surgió el Canal 4?
-Ah, la venerable Margaret Thatcher quería desarrollar
un canal independiente a la BBC, porque no le gustaba. Buscaba generar
competencia. El Canal 4 tenía que levantar su dinero de los anuncios.
No puede producir y los encarga a productores para su realización.
Esa es la diferencia. La BBC emplea a 25 mil personas y Canal 4 a 700.
Es más dinámico, menos burocrático. Tenemos tratos
con distintos sindicatos.
-¿Qué opinión le merece la televisión
mexicana?
-He visto el Canal 22. Creo que es una televisión
comercial con un lenguaje muy similar al de la estadunidense. En pantalla
hay mucha gente joven y muy pocos viejos. El foco de atención es
la gente famosa, los bonitos, como en las telenovelas. No vi ningún
noticiario.
-¿Considera que exista crisis de creación
en la televisión norteamericana, latinoamericana?
-Sí, pero es una crisis de creación generalizada.
Primero, está el cambio tecnológico de lo analógico
a lo digital, que permitirá la existencia de muchos nuevos canales.
Unos son muy pobres, porque tienen bajos presupuestos y esto reduce la
calidad de los programas televisivos en general.
En Gran Bretaña existe ahora una alianza non
sancta entre la BBC y Robert Murdoch, de la Fox, que tratan de tener
el completo control del futuro digital, y Canal 4 intenta estar en la competencia.
-¿Cómo tratan de establecer este control?
-Por el marketing y el dinero que tienen para los
proyectos. Compran y desarrollan los mejores programas. Ellos utilizan
parte de su presupuesto para comprar series. Canal 4 utiliza la popularidad
de algunos programas para conseguir fondos, pero en el futuro Murdoch les
puede quitar esos programas porque tiene más presupuesto.