Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 5 de diciembre de 2002
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Política

Convocan en el último día de reunión a la paz en Chiapas y Colombia

Condenan en Oaxaca represión a comunidades

ROSA ROJAS ENVIADA

Oaxaca, Oax., 4 de diciembre. La primera Cumbre de Mujeres Indígenas de las Américas concluyó con la exigencia a los estados nacionales de cesar ''cualquier tipo de acción militar, sicológica o de genocidio'' contra aquellos pueblos indios que luchan por la autodeterminación y el respeto a sus recursos naturales. Asimismo llamó a la reanudación del proceso de paz en Chiapas mediante el diálogo y pidió se garantice la seguridad de la población de los municipios autónomos zapatistas.

Igualmente llamó al mundo a solidarizarse con los pueblos indios colombianos, que están siendo masacrados por grupos al margen de la ley, para que tanto el gobierno de Colombia como esos grupos no los incluyan en el conflicto armado, pues ellos son pueblos que reivindican su autonomía.

En la declaración y el plan de acción elaborados por las casi 400 delegadas se exige a los estados terminar con todas las formas de discriminación, racismo y violencia, incluyendo la violencia sexual "utilizada como arma de guerra genocida en los conflictos armados", que afecta principalmente a mujeres y niñas indígenas.

Asimismo, garantizar el derecho a una atención de salud de calidad, incluidas la salud sexual y reproductiva desde la cosmovisión indígena, y que la atención por daños sicológicos sea culturalmente apropiada y respete la identidad y los conocimientos médicos tradicionales de los pueblos y las comunidades indígenas, así como a eliminar los programas de esterilización forzada promovidos por algunos gobiernos.

Se acordó también demandar a la ONU una segunda década de los pueblos indios, con énfasis en las mujeres.

En el documento se exige además el respeto y la no imposición de políticas económicas, sociales y culturales que atenten contra la vida y la dignidad de los pueblos y mujeres indígenas. Se rechazan, por lo tanto, programas y proyectos como el Plan Puebla-Panamá, el Acuerdo de Libre Comercio de las Américas, el Plan Colombia, el Plan Mesoamérica, el Tratado de Libre Comercio, el Plan Coca Cero, el Pacto Andino y Amazónico y el Corredor Biológico Mesoamericano.

También se exige a los estados revisar la aplicación de sus políticas neoliberales como privatizaciones, ajuste estructural, liberalización del mercado en el ámbito económico, social, cultural y educativo, y el inicio de ''un diálogo constructivo con las organizaciones indígenas, especialmente de mujeres indígenas, en la búsqueda de propuestas alternativas".

Se demanda a las agencias de cooperación ''respetar y promover una perspectiva de desarrollo o etnodesarrollo y autogestión, basada en nuestra cosmovisión". Les exige además realizar acciones efectivas en la lucha contra la pobreza, la contaminación ambiental, la entrada de productos químicos a sus respectivos países, especialmente los no permitidos por su alto grado de toxicidad, y el uso de transgénicos, todo ello con la plena y efectiva participación de las mujeres indígenas.

Las declarantes exigen a los estados garantizar el derecho de los pueblos indígenas a la propiedad y demarcación de sus tierras y territorios, y la inclusión de las mujeres indigenas al acceso a la tenencia de la tierra y a su inmediata titulación.

Recomiendan a la vez a sus pueblos establecer alianzas y redes entre organizaciones indígenas para denunciar los efectos negativos de la globalización en cuanto a sus derechos, especialmente los económicos, sociales y culturales, así como presentar propuestas alternativas al actual modelo de desarrollo neoliberal, con su propia cosmovisión.

En materia de derechos humanos, exigen a los estados miembros de la ONU la inmediata aprobación del proyecto de Declaración de los derechos de los pueblos indígenas del mundo, de acuerdo con el borrador aprobado por la Subcomisión para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos según resolución 1995/45, y a los estados miembros de la OEA, la aprobación del proyecto de la Declaración americana de los derechos de los pueblos indígenas.

Demandan a los estados ratificar, operativizar mediante propuestas de ley e instrumentar las convenciones y sus protocolos para proteger los derechos de las mujeres y de los niños; el Convenio de la Organización Internacional del Trabajo 169 sobre Pueblos Indígenas y Tribales en países independientes; la Convención Internacional para la protección de los derechos de todos los trabajadores migrantes y sus familiares; el Estatuto de Roma de Creación de la Corte Penal Internacional; el Convenio de Biodiversidad Biológica.

También que reconozcan, respeten y promuevan la existencia milenaria y aplicación del derecho indígena en todos sus aspectos -civil, penal, comercial e internacional-, y adecuar sus políticas y legislaciones internas a éste.

Números Anteriores (Disponibles desde el 29 de marzo de 1996)
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