La cantautora española lanza su cuarto disco, Libre

Disqueras hacen mal en firmar a tantos artistas: Ana Cirré

JUAN JOSE OLIVARES

Ana Cirré es una cantautora española que ha hecho de México su segunda patria, país al que llegó hace unos 12 años. Ha compartido escenario con Elton John, Tom Jones y Nana Mouskuri. Ricardo Arjona produjo su anterior disco, Jamás me olvidarás. Ahora, la hija de Miguel Cirré, uno de los famosos integrantes de los Churumbeles de España, quien fue su mentor musical, presenta Libre, su cuarto trabajo, en el que por cierto todas las composiciones son de ella.

"Busqué hacer un disco completo que tuviera diez sencillos a promover, sobre todo teniendo en cuenta la piratería y lo duro que nos está dando, para que la gente tenga más motivos para comprar el original. La industria está deprimida por los golpes de la piratería; las compañías están sin poder adquisitivo y la gente está con mucho miedo y deprimida, si a eso le encimas que cada vez hay menos creatividad, lo poco que queda hace que se vea desértica", comenta en entrevista.

Y sí, Ana está en contra de los corsarios, ya que hasta en el libro del disco se encuentra un gesto de agradecimiento: ''Gracias por comprar mi disco, acabas de salvar la vida de un artista".

Este y otros detalles hacen al disco de Cirré muy personal, como a la artista le gustan las cosas. Es de hecho uno de los motivos por el cual lo sacó de forma independiente.

"La palabra libre es muy contundente. Estoy ahora con un sello independiente, lo cual me da más libertad; antes estuve en una compañía trasnacional. Quería que el trabajo fuera más elaborado, que fuera más dedicado. Es que a veces en las compañías grandes hay tantos artistas que es muy dífícil trabajar con tanta gente; hacen mal en firmar a tantos, una vez que estás dentro es muy complicado. Es bueno poder elegir todo, desde el color del disco hasta de lo que quieres hablar en tus canciones. No es fácil hoy en día poder conseguir la libertad a nivel laboral."

Agrega: ''Yo decidí irme de la compañía; de alguna manera tuve que pelear para que me dieran mi carta de libertad, ya no estaba a gusto y no se hacía lo que me habían prometido. Ellos como empresa tienen muchos artistas, muchas opciones para salir adelante y yo sólo me tengo a mi misma; si me fallo, me quedo sin nada. Aunque no tenemos que olvidar que una casa de discos existe por los artistas y eso a veces se les olvida; te hacen ver como si te estuvieran haciendo un favor cuando al final somos socios. Salir tiene sus ventajas y desventajas, pero las primeras pesan tanto que lo disfrutas mucho".

Entre jingles, bares y pubs

Ana es posedora de una fina voz que emana a través de bien estructuradas historias de amores y desamores; son más bien "actos de amor o de pasión", de una sensualidad que la artista ha asumido a lo largo de su maduración. Los arreglos de este rojizo y pulsante disco son del productor y músico de Alejandro Sanz y The Corrs, Emanuelle Ruffinengo. Y por si fuera poco, el maestro Chamín Correa la acompaña en alguno de los temas.

Ana comenta cómo llegó a nuestro país. "En México empecé a nivel discográfico con Hora es de hacer el amor y su sencillo La vida pasa factura. En España, a inicios de los años 90 no se grababa a los solistas, menos si eras mujer; entonces, un productor con el que yo hacía muchos jingles me propuso hacer un disco. Por aquellos años cantaba en bares y pubs; y hacía coros para otros artistas, pero de disco ni idea. Otro parteaguas se dio un día por azares del destino, cuando Ricardo Arjona me quiso producir sin siquiera conocerme; pasó el tiempo, él se hizo famoso y me buscó."

Con o sin Arjona atrás, la Cirré tiene el bagage para adentrarse en el corazón de los romanticones que buscan piezas de amor, pasión y hasta recuerdos olvidados.