PARACHICOS


Es tiempo de visitar Chiapa de Corzo, vamos a celebrar "La Fiesta Grande"; durante los días 18 al 23 de enero, tiene lugar cada año la representación de los Parachicos. Se lleva a cabo con la participación de mas de mil danzantes con sus magníficos trajes y sus máscaras finamente talladas en cedro rojo.

Los orígenes de la fiesta son muy antiguos. Sabemos que Chiapa de Corzo fue la primera ciudad fundada en Chiapas por los españoles, en 1528; unos años después se les asigna a los indios como patrono a san Sebastián y para los españoles a santo Domingo de Guzmán. En el año de 1554 se inicia la construcción de la iglesia dedicada a santo Domingo y se termina en 1568.

Desde entonces se hace la fiesta en honor a San Sebastián el día 20 de enero, en la iglesia de Santo Domingo. Hay procesión con los santos y visita a la casa del mayordomo. Los Parachicos zapatean al ritmo de los sones, tocados por un tamborcillo y la flauta de carrizo. Se desfila primero por las calles, después se baila en los patios de las casas y se recorre la población en grupos comandados por un patrón.

Se dice que hacia 1650 llegó a Chiapa de Corzo, procedente de Guatemala, una señora de nombre María Angulo; después de muchos intentos infructuosos de cura para su hijo que no podía caminar, había decidido consultar a un médico indio de la región. Éste le recetó preparados con plantas nativas y baños en la pequeña laguna de Combujuyú (baño del jabali). El hijo sanó, y en agradecimiento, la señora Angulo, acompañada de sus ayudantes provistas de canastas, repartió víveres entre la población.

A partir de esta leyenda, una de las versiones que explican el origen de la danza de los Parachicos, y la más difundida en la actualidad, considera que los Parachicos representan a los caporales de María Angulo y que las Chuntá (hombres vestidos de mujer, maquillados y con canastas que llenan de fruta), son las ayudantes de la señora. Estos dos grupos danzan por separado en distintos momentos, aunque ambos toman parte en las representaciones de la fiesta.

En el caso de los Parachicos hay dos personajes: el patrón y los Parachicos con tipo europeo; usualmente en los conjuntos hay un patrón y entre ocho y doce Parachicos. Las máscaras de Parachico y de patrón están laqueadas en color encarnado claro, los ojos son de vidrio, en color azul, verde o castaño claro y con grandes pestañas sobrepuestas. Hay gran maestría en el laqueado y en el tallado de la barba, así como en el sombreado que representa a la parte rasurada. Por dentro las máscaras están pintadas en blanco.

En la cabeza llevan una montera hecha de ixtle tejido y anudado, especie de sombrero que frecuentemente se confunde con una peluca; sobre los pantalones negros se ponen otros más cortos con flecos y profusamente bordados con flores. La camisa es blanca, se colocan en el pecho dos bandas cruzadas en honor a san Sebastián y en los hombros llevan un sarape tipo Saltillo con franjas de gamas de colores, que a veces se alternan con negro.

Completa el atuendo una sonaja de hojalata que se lleva en la mano derercha. Se le llama chinchín, y su nombre evoca a la sonaja original, que era un guaje, fruto de la planta regional llamada también morro (Lagenaria leucantha).

En la actualidad la fiesta grande se complementa con otras actividades; se le han sumado festividades religiosas y sociales que se inician el día 9 de enero, cuando las Chuntá van por las calles en las noches bailando al son del Bayasando (ayudante o sirvienta) con sus pequeñas canastas; en la cabeza se ponen flores y banderitas amarradas con un listón. La noche del día 14 es el "rompimiento" de la fiesta y el 15 (día del señor de Esquipulas) salen los Parachicos, que continuarán bailando por las calles los siguientes días.

El día 21 de enero se efectúa por la noche en el río Grijalva un "combate naval". Su celebración se inició en 1554, y aunque se interrumpió por muchos años, se retomó en 1906; desde entonces se sigue verificando. Consiste en un espectáculo de pirotecnia en el que la superficie del río sirve como espejo. El día 22 las mujeres visten su traje regional y participan activamente en la fiesta; el día 23 en el parque del centro de la ciudad se realiza como último acto, el "combate de confeti y serpentinas". También hay desfile de carros alegóricos y feria artesanal.
 
 

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