El sudario, alterado

Responde científico a sectas: imposible clonar a Jesucristo

ALMA E. MUÑOZ

La clonación de Jesucristo es imposible, atajó el físico universitario Adolfo Orozco Torres durante una conferencia en las instalaciones de la Arquidiócesis de México, y con ello se sumó a las protestas de la Iglesia católica contra este método científico.

Frente a la intención de algunas sectas de clonar a Cristo a partir de tomar muestras de sangre de la sábana santa, refirió que esto no es probable, porque en principio "no hay ninguna garantía de que el ADN sea de Jesús". Manifestó que el sudario "ha sufrido tantas vicisitudes, entre ellas ha sido tocado, besado y manipulado por miles de personas a lo largo de la historia, que la sangre ha sido muy alterada".

Como presidente del Centro Mexicano de Sindonología (estudios sobre el lienzo en que habría sido envuelto el cuerpo de Jesucristo después de ser crucificado), vislumbró la intención de quienes impulsan dicha propuesta para ver si es posible adelantar la segunda venida de Cristo al mundo mediante aplicaciones científicas.

Quieren hacerlo, sostuvo, porque finalmente reconocen que Cristo es el centro de la historia humana y por ello quieren recurrir a los restos de sangre que contiene la sábana santa, conservada en la catedral de San Juan Bautista, en la ciudad de Turín, Italia.

Creen, insistió, que así pueden obtener el material genético, pero "esto es una verdad a medias y, por tanto, una mentira completa. Efectivamente, en la sábana santa existen residuos sanguíneos que permitieron determinar, a principios de los años 80, que se trata de sangre tipo AB, pero eso no significa tener información suficiente como para producir, siquiera parcialmente, los cromosomas de Jesucristo".

Más aún, subrayó Orozco Torres, desconocer su genoma significa carecer de garantía alguna para demostrar que el ADN le perteneciera. Hay que recordar, precisó, que el lienzo ha estado expuesto hasta a incendios; la gente lo ha tocado, pisado y hasta llorado en él. Ha sido manipulado y eso, "suponiendo sin conceder que se pudiera clonar la naturaleza humana de Jesús, no significa hacer lo mismo con su naturaleza divina".