Perdimos 6 años de fogueo, dice la entrenadora de nado sincronizado

Una medalla en Panamericanos, reto de Asseva

ROSALIA A. VILLANUEVA

Con el reto de conseguir una medalla en el nado sincronizado en los Juegos Panamericanos de Santo Domingo 2003 en algunas de las modalidades de solo, dueto o por equipos, la entrenadora rusa Olga Asseva insistió que mientras México no aparezca en el ranking mundial, no se dará por satisfecha, porque "ya hemos perdido seis años de fogueo y esa es nuestra realidad''.

Asseva asume el difícil panorama que enfrenta este deporte para estar de nuevo en el plano internacional, pues en dos años de trabajo "no se pueden hacer milagros"; sin embargo, consideró que, si se trabaja bien y mantiene el respaldo de los directivos, posiblemente el nado sincronizado esté a la par de las potencias mundiales como sucedió en el pasado en las citas del orbe y Juegos Olímpicos.

La rusa dijo que a seis meses del compromiso en Santo Domingo, un quinto o sexto lugar la dejaría insatisfecha, por lo que está dando seguimiento al equipo que ganó oro en los Centroamericanos para estar peleando una medalla a Estados Unidos, Canadá, Venezuela y Brasil, en los Panamericanos.

En cuanto al Mundial de Barcelona, España, en julio próximo, la entrenadora subrayó que esa será la realidad que enfrentará el nado sincronizado. "Voy a dar la cara por México y aceptar el rankeo, perdimos seis años de fogueo, nos ausentamos de mundiales y copas FINA, por eso es importante saber en qué nivel estamos actualmente."

Aunque Asseva tiene como base del equipo a la triple medallista regional, la solista Olga Vargas, quien hace dueto con Nara Falcón, quien se recupera de una enfermedad en los riñones y estuvo ausente en el tercer selectivo, que se realizó ayer en la alberca del CDOM, para conformar las selecciones de primera fuerza y junior. La rusa mostró su preocupación por la falta de nadadoras, pues se presentaron 18 y les faltan cinco para completar a las 12 integrantes en cada categoría.

Comentó que "la evaluación fue un punto de partida", pero que a "las niñas les hace falta fuerza, extensión y técnica", y que los únicos cambios que haría sería en la rutina, música y grado de dificultad.

Vargas impuso su clase conservando el liderato individual del selectivo, donde también destacó Bárbara Orta, quien la secundó seguida de Diana de la Cruz.