Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Viernes 7 de febrero de 2003
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Cultura

Circula en España y llega a México la primera parte de su nuevo libro, Tu rostro mañana

Aznar planea cómo seguir a los ''locos de la guerra'': Marías

Demencial, sostener que si EU no prueba que Irak tiene armas letales, éstas existen, señala

Sucede a menudo que ''intelectuales y escritores parecen saberlo todo y de todo opinan''

CESAR GÜEMES

La nueva obra de Javier Marías, la primera parte de una novela de más de mil páginas titulada Tu rostro mañana, 1. Fiebre y lanza (Alfaguara), aparece en España y llega a México en una situación mundial a todas luces prebélica. El prosista, uno de los autores españoles más leídos tanto en castellano como en los 32 idiomas en los que se ha traducido su trabajo, no evade su responsabilidad como ciudadano de una nación cuyo gobierno apoya la guerra contra Irak. Dice para La Jornada: ''Estoy totalmente avergonzado de la actuación y postura del gobierno de mi país".

Y explica: ''Mi incomodidad es absolutamente extrema. La postura del gobierno español fue tomada de forma desdeñosa, aprovechándose de que el Partido Popular tiene mayoría en el Parlamento. Con eso han hecho a un lado las opiniones del resto de los grupos políticos que representan a casi la mitad de España. Si esto fuera poco, según las encuestas más recientes, 80 por ciento de los españoles están en contra de la posición tomada por el gobierno".

Siempre las dudas

El autor de novelas clave del siglo XX, como Corazón tan blanco, Mañana en la batalla piensa en mí o Negra espalda del tiempo, sabe que ''a menudo sucede con los intelectuales y los escritores que parecen saberlo todo y de todo opinan. En mi caso albergo dudas siempre. Y como cuando estaba a punto de darse la guerra del Golfo no me quedaba clara la situación bélica, así ahora me parece que no hay necesidad de llevar a cabo una nueva guerra".

Y ejemplifica: ''Veamos. Las negociaciones que se efectúan para estallar el conflicto incluyen aberraciones jurídicas que me parecen gravísimas. El señor Donald Rumsfeld, secretario de Defensa estadunidense, ha dicho que la falta de pruebas de que Saddam Hussein tenga cierto tipo de armas no significa que las armas no existan. Lo cual es absolutamente demencial".

Antes de pasar a expresiones de orden literario, Marías abordó el tema del llamado ''ataque preventivo", del cual afirmó que ''a fuerza de mencionarlo una y otra vez parece que fuera algo tolerable o aceptable. Si trasladamos eso mismo al ámbito individual, eso equivale a que me diera por temer que mañana el presidente de mi gobierno, el señor Aznar, atentara contra mi vida; y en respuesta a ese temor tuviera derecho, según la teoría, a atentar yo primero contra la suya. Es un disparate, como puede verse. En el mundo hay dirigentes con un cinismo que raya en la locura. Lo que no se puede hacer, y lamentablemente es lo que instrumenta en este momento el gobierno español, es seguir a esos locos o a esos cínicos".

Ambicioso proyecto literario

Tu rostro mañana, 1. Fiebre y lanza, de casi 500 páginas, es sólo la primera parte de un ambicioso proyecto literario que abarcará al menos el doble de espacio y cuya segunda entrega prepara Javier Marías. Su conocimiento sobre lo que les suceda a los personajes en esa parte complementaria es tanto como el que puede imaginar el lector, ya que, explica, ''cuando empiezo un libro es evidente que tengo algunas ideas sobre las cuales trabajar y un cierto rumbo hacia el cuál ir. Lo que no tengo es un mapa. Hay escritores que cuentan con él desde que empiezan el trabajo. Si a mí me pasara eso y estuviese al tanto de que enseguida me toparé con un río y luego con un precipicio y después con un desierto, acabaría por no escribir.

''Me llena bastante más lo que entiendo como un proceso de averiguación. La palabra inventar originalmente significa descubrir, averiguar o encontrar. Así que me gusta comprender lo que escribo a medida en que lo veo en la página. Claro, tengo una brújula, pero lo que no sé es si me voy a topar con un desierto o una selva. Eso lo veo cuando llego al sitio."

-El propósito de su narrativa, entonces, puede ser más de orden formal.

-La literatura tiene razón de ser, pero carece de una misión específica. Aquellos que empiezan a escribir con un planteamiento extraliterario, pensando en que van a educar a sus conciudadanos, no consiguen una obra rica desde el punto de vista literario.

-Escribir, en ese sentido, es un modus operandi más que una forma de vida.

-He comprobado que al escribir pienso de manera distinta a cuando hablo o sencillamente medito sobre un tema. Una de las razones por las que continúo en la literatura es para no renunciar a una forma de pensamiento que sólo se me da a mitad de la escritura.

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