DINERO
Enrique Galvàn Ochoa
Sube hasta 7 pesos el kilo de tortilla por devaluación
Se va Corta de la Consar
La morralla del súper
EL EFECTO DE LA devaluación del peso ya se sintió en el bolsillo de las familias mexicanas. Subió el precio de la tortilla. En el Distrito Federal y sus alrededores se vendía en 4.50 y 5 pesos el kilogramo hasta fechas recientes; un número incontable de tortillerías lo aumentaron ya a 5.50 y 6 pesos. En el norte del país tenía un precio de 6 pesos con 50 centavos. Ayer se vendía a 7 pesos el kilo. Cuando tomó posesión el nuevo gobierno, hace dos años y meses, el kilo de tortillas costaba 4 pesos con 50 centavos.
Ya se va
DESDE QUE DON Vicente lo designó presidente de la Consar, resultó obvio que había cometido un error. ƑCómo llevar al ex presidente del Ipab-Fobaproa, Vicente Corta, a manejar el sistema de ahorro de los trabajadores? En el Fobaproa había dejado endeudado al país por lo que resta del siglo, mediante los rescates bancarios. Se requería a una persona de acrisolado prestigio para dirigir una organización que hasta entonces había marchado muy bien. Aparentemente ya se va pero le hizo mucho daño al sistema. El dinero que manejan las afores quedó depreciado en una cuarta o quinta parte de su valor, por efecto del desplome del peso.
San Luis
EL GRUPO SAN LUIS aclaró que no ha sido declarado en concurso mercantil, un elegante término jurídico conectado con otro muy feo: bancarrota. Dice que actualmente se encuentran corriendo los plazos para dar contestación a una solicitud de declaración de concurso mercantil que ha intentado un presunto acreedor por un monto de 2.5 millones de dólares. San Luis no se encuentra en esa situación, pero la devaluación del peso frente al dólar y el euro va a poner en aprietos a muchas compañías mexicanas que arrastran pesadas deudas.
e-Vox Populi
ASUNTO: LA MORRALLA DEL SUPER
Recibí copia de un emilio que Cinthya Alfonso ([email protected]. mx) le envió a Martha Castrezana ([email protected]):
"Señora Martha,
Estoy de acuerdo con sus opiniones, salvo por un detalle; no estoy dispuesta a que mi morralla sirva para:
1. Engordar la cartera personal de Marta Sahagún
2. Financiar sus encubiertas campañas proselitistas
En ocasiones anteriores nos han pedido en los supermercados que se done el cambio, morralla, para equis causas, generalmente relacionadas con la infancia, y puedo asegurarle que al conocer de ese tipo de movimientos no he tenido ningún recelo en hacerlo y muy seguido compro mi "kilo de ayuda". Por lo tanto, el adjetivo de egoísta que me ha echado encima simplemente no me corresponde.
No me conformo con sentirme a gusto porque muy cómodamente dono unos cuantos pesos o centavos, de vez en cuando, por medio de una tienda. Participo en cualquier actividad a la que se me invite con propósitos de ayuda a los que tienen menos que yo, que tampoco tengo mucho Ƒeh?, o me invento ayudas tanto para vecinos, conocidos o hasta chicas del servicio doméstico de casas de la colonia. Para ayudar no tengo empacho.
Simplemente no confío en la señora Sahagún, su marido, ni nadie que tenga que ver con el actual gobierno. Y eso, mi querida señora, es algo que ni me hace egoísta, ni mala ciudadana, ni inconciente, ni nada por el estilo. Y le aclaro muy bien que entre mis múltiples y no pequeños defectos no se encuentra el de ser ingenua ni el de dejarme llevar por palabritas cursis y atarantadas o por discursos por demás absurdos y contradictorios.
Por eso, Martita y Chente pueden decir misa y comer pinole, a mí simplemente no me convencen y no será mi morralla la que les engorde el bolsillo".
[email protected]
