PEDIRAN QUE EL INAH CANCELE PERMISO A WARNER BROS EN BCS

La Paz, BCS. El delegado del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) en Baja California Sur, Jorge Luis Amao Manríquez, indicó que conforme a la Ley Federal de Monumentos Históricos y Zonas Arqueológicas, pedirá que se cancele el permiso de filmación de la película Helena de Troya, la cual pretende rodar la empresa Warner Bros. Inc. en las dunas y en el Faro Viejo de Cabo San Lucas. Precisó que está por llegar a Baja California Sur una consultoría del INAH de la ciudad de México para determinar si se autoriza o no la filmación de la película, que tendrá una inversión de 200 millones de pesos y en la que se pretende contratar entre mil y mil 500 extras. El funcionario federal adelantó que difícilmente el INAH permitirá que se filme la película, que protagonizará Brad Pitt, ya que se quiere rodar en las dunas del Faro Viejo de Cabo San Lucas, construido en 1905 y considerado monumento histórico. Dijo que de acuerdo con un estudio, el Faro Viejo tiene serias fallas estructurales y en por lo menos 500 metros a su alrededor está prohibido cualquier tipo de actividad recreativa.

El pasado 8 de febrero el Auditorio Nacional recibió el reconocimiento Pollstar Awards al mejor recinto internacional para conciertos, otorgado por el Concert Industry Consortium de Estados Unidos con base en la decisión de un grupo de cien profesionales de la industria de los conciertos de ese país. El centro de espectáculos mexicano compitió con el Evening News Arena de Manchester (Inglaterra), la Globe Arena de Estocolmo (Suecia), el Heineken Music Hall de Amsterdam (Holanda), el Shepherds Bush Empire de Londres (England) y la Super Arena de Saitama (Japan). El Concert Industry Consortium fue fundado en 1994 con el propósito de lograr mejor comunicación entre los empresarios que se dedican a la producción de conciertos en todo el mundo. Con este premio el Auditorio Nacional se coloca entre los foros más llamativos y cotizados del escenario musical.

Moscu, 10 de febrero. El teatro Dubrovka de Moscú volvió a estrenar la noche del sábado su musical Nord ost, más de tres meses después del secuestro de 800 personas en sus instalaciones por terroristas chechenos, que acabó con la muerte de 129 de los rehenes. Los espectadores que acudieron a ver el espectáculo en el teatro totalmente renovado guardaron un minuto de silencio en recuerdo de las víctimas. "El terrorismo no tiene oportunidad alguna porque nos oponemos a él", afirmó el alcalde de Moscú, Yuri Lushkov. Entre los espectadores también se encontraban algunos de los que fueron rehenes durante el secuestro ocurrido el 23 de octubre. El espectáculo ha podido ser reanudado gracias, sobre todo, a donativos privados. El musical sobre amor, esperanza y una olvidada expedición polar es escenificado ahora de manera más alegre. Una joven fue la primera de los ex rehenes en aparecer en el teatro. Al ver la renovación del edificio suspiró aliviada y declaró: "Me siento feliz de estar ahora aquí no como rehén, sino como un ser humano libre". El gobierno apoyó reanudar el musical como símbolo del sin sentido del terrorismo checheno.