Apremia a reivindicar esa filosofía, ''porque prevalece el carácter opresor del capitalismo''

En juego, la vigencia y validez del marxismo: Sánchez Vázquez

Con los comentarios de Gutiérrez Vega, Federico Alvarez, Flores Olea y Vargas Lozano, el académico presentó El joven Marx. Los manuscritos de 1844, en la Feria de Minería

CESAR GÜEMES

"Hoy no está en juego la interpretación del marxismo, sino la vigencia y validez mismas del marxismo", dijo rotundo la tarde de este domingo Adolfo Sánchez Vázquez, autor del clásico volumen El joven Marx. Los manuscritos de 1844, que reditado al alimón por La Jornada, Editorial Itaca y la UNAM, se presentó en la vigesimacuarta Feria Internacional del Libro del Palacio de Minería, con los comentarios de Hugo Gutiérrez Vega, Federico Alvarez, Víctor Flores Olea, Gabriel Vargas Lozano y el propio Sánchez Vázquez.

Federico Alvarez recordó la polémica mantenida entre las posturas de Sánchez Vázquez y Louis Althusser, atizada por uno de los discípulos de este último, a quien Sánchez Vázquez respondió "con algo importantísimo que encierra justamente la función del libro que hoy presentamos: el rechazo de la posibilidad de divergir entre marxistas y la exigencia de que una posición desaparezca en la opuesta es lo propio de una experiencia histórica que el marxismo ha pagado muy caro teórica y prácticamente, y por lo tanto no debe volver".

La vigencia del análisis social de Marx se mantiene para Flores Olea, quien apuntó en su momento: "Por supuesto que el sistema capitalista se ha transformado en estos 150 años y que hay una multitud de transformaciones tecnológicas aplicadas a la producción de recursos que el hombre tiene para producir y trabajar. Pero las observaciones críticas y rigurosas de Marx sobre la esencia del funcionamiento del sistema capitalista siguen siendo plenamente válidas".

Poeta, coordinador de La Jornada Semanal, Hugo Gutiérrez Vega hizo una evocación necesaria a la figura del ensayista y traductor Wenceslao Roces, que fue acompañada con entusiasmo por el público que abarrotó el auditorio Bernardo Quintana. Dijo luego Gutiérrez Vega: "La publicación de este libro es fundamental para recuperar los estudios de crítica marxista. La chabacanería de los capitostes del capitalismo salvaje, filisteos los llamaría el joven Marx, habla del fracaso teórico y de la ineficacia práctica del programa. No sabemos a qué programa se refiere e ignoramos cuál teoría fue llevada a la práctica. Lo que sí sabemos es que la crítica sigue viva y que circula con toda su riqueza sugerente en los pensamientos, glosas y estudios" de aquellos pensadores que a lo largo de la historia han seguido a Marx, "en nuestro medio, fundamentalmente, Adolfo Sánchez Vázquez, quien tiene razón al decirnos que los manuscritos no se limitan a la crítica y el conocimiento de lo existente, sino también a proyectar una verdadera emancipación humana".

Coincidió con él Gabriel Vargas Lozano, al señalar que el libro de Sánchez Vázquez constituye "uno de los análisis más serios y rigurosos que se han realizado en torno a esta obra clave del pensador revolucionario".

Adolfo Sánchez Vázquez rememoró su interés por el volumen ahora reditado: "Cuando este libro se publicó por vez primera, hace 30 años, estaba en el centro de la polémica el significado de esa obra juvenil de Marx, Los manuscritos económico-filosóficos de 1844. El intento mío de su estudio y esclarecimiento consistía en rescatar el contenido propiamente humanista de Marx. Hoy no está en juego la interpretación del marxismo, sino la vigencia y validez mismas del marxismo. Eso es hoy para nosotros una cuestión fundamental. El marxismo necesita ser reivindicado en este momento porque, como sabemos, aunque hayan cambiado ciertos aspectos del capitalismo, su naturaleza explotadora y opresora se mantiene y agrava en la forma como se nos presenta en estos días".

Así que el marxismo, apuntó Sánchez Vázquez, "requiere una transformación práctica de la sociedad existente y no sólo el diseño de una sociedad futura mejor; necesita una práctica para poner en la realidad ese diseño de una nueva sociedad. Si esto es así, la crítica de lo existente sigue siendo hoy más necesaria que nunca, porque el mundo hoy es más injusto que nunca. Por eso se hace indispensable una fundamentación científica, objetiva, racional, de esa transformación".

No escapó a Sánchez Vázquez el lazo entre la reivindicación del marxismo y la actualidad mundial prebélica. Con su comentario en torno al tema concluyó la presentación de El joven Marx: los manuscritos de 1844: "Hay un antihumanismo representado hoy por una potencia unilateral que nos amenaza con llevarnos a una barbarie que jamás sospechó Marx. Ese antihumanismo que tenemos a la vista con al doctrina de una 'guerra preventiva', con los inmensos sufrimientos y sacrificios que ella traería a la humanidad, exige una respuesta no sólo teórica, que es necesaria para fundamentar la acción, sino una respuesta práctica. Una respuesta práctica que afortunadamente comenzamos a ver en las grandes manifestaciones y movilizaciones de estos días. Todo lo que contribuya a fundamentar, establecer y reivindicar un verdadero humanismo, como lo hace el verdadero marxismo, es hoy más necesario que nunca".