Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Lunes 24 de febrero de 2003
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Deportes

Kahwagi no sabe pegar, y el ruso es malísimo, dice el réferi Ayón

No me vendí; no sé qué me pasó: Alfonso Keb

CARLOS HERNANDEZ

El yucateco Juan Alfonso Keb y el nicaragüense Ernesto Castro aseguraron estar con la conciencia tranquila.

"Yo soy como Augusto César Sandino: ni me vendo ni me rindo. En mi pelea no hubo fraude, él me conectó bien, y ya no me pude levantar", expresó El Torito Castro con respecto a su derrota en el primer round ante Jorge Travieso Arce.

"Nunca hubiera aceptado vender la pelea. La verdad, sepa la madre qué me pasó, nunca me había sucedido", justificó Keb, quien dio la espalda en el séptimo asalto, con lo que José Antonio Aguirre conservó el cetro mínimo del CMB, a pesar de que había caído en el cuarto round.

El réferi Guillermo Ayón, el testigo más cercano de las caídas del ruso Alexei Osokin, admitió que el empresario Jorge Kahwagi "no sabe pegar; nada más como que estira la mano, pero creo que sí le dio un golpe. No podría afirmar que el ruso vino a caerse, aunque de los dos ganó el menos malo".

Un día después, los implicados en la función del sábado en la Plaza México dieron su versión.

-Fue muy extraña tu reacción después de que casi tenías noqueado a Aguirre. Como que dejaste de pelear -se le indica a Keb.

Sin molestarse, el yucateco respondió: "No hice fraude, a mí no me gustaría manchar mi carrera con una cosa así. El me estaba golpeando bajo y de repente se me acalambró todo el estómago y las piernas. Ya no pude seguir, ya no tenía fuerzas, por eso di la espalda, no porque me haya vendido".

Por su parte, Castro indicó que sí cayó por un impacto sólido. "En el boxeo un golpe de nocaut puede llegar en el primero o en el último asalto. A mí me tocó en el primero. En mi pelea no hubo nada extraño, a mí nadie me dio nada, sólo mi sueldo", dijo el centroamericano.

Sólo se quejó de que lo hicieron llegar con poco tiempo para aclimatarse, el martes, y que el pesaje fue con más de 24 horas de anticipación, como lo estipula el reglamento. Por ello, "la verdad El Travieso sí iba muy fuerte anoche, me supo conectar y me quise levantar a los seis segundos, pero se me entumieron las piernas", explicó.

Atajó su mánager Ray Mendoza: "El que tiene más interés de que gane soy yo. No perdimos porque él fue muy superior, porque nosotros no nos vendemos por dinero, nosotros tenemos otros ideales".

A su vez, el réferi Ayón dijo que en términos generales todas las peleas del programa Peleando por México eran disparejas, "por eso pudiera parecer que hubo fraude".

"Los retadores no fueron de categoría, y eso es lógico, ya que los campeones no cobraron y no los iban a exponer", justificó.

Por su parte, al tabasqueño Aguirre no le pareció extraño el abandono de Keb. "El se dolía cada que le pegaba abajo y en los últimos asaltos estaba muy cansado", expresó y dijo que será la primera y única vez que expone el título sin cobrar nada.

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