Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Lunes 10 de marzo de 2003
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Sociedad y Justicia

Costarán 900 millones de dólares y estarán terminadas en cinco años: Conagua

Proyectan construir cuatro plantas tratadoras de agua en el valle de México

CAROLINA GOMEZ MENA

Puesto que en el valle de México sólo se trata 10 por ciento de aguas residuales, el próximo lustro se construirán cuatro plantas saneadoras, proyecto que requerirá una inversión de aproximadamente 900 millones de dólares, informó Raúl Solís Castro, subgerente de Desarrollo Agrícola y Forestal de la gerencia del Lago de Texcoco -instancia dependiente de la Comisión Nacional del Agua (Conagua)-, quien acotó que la expectativa es que con ellas se logre tratar hasta 49 metros cúbicos por segundo.

La idea es que al tener en funcionamiento las cuatro plantas el Distrito Federal empiece a prescindir -siempre y cuando pueda ser potabilizada- de los 15 metros cúbicos de agua por segundo que son traídos del sistema Cutzamala, puesto que esto, además de que no es bien visto en el estado de México -pues ahí se explotan 19 metros cúbicos por segundo y sólo se quedan cuatro en esa entidad-, encarece notablemente el costo del líquido.

En entrevista, Solís sostuvo que el agua que se trae del Cutzamala es la más cara que se consume en la capital, pues debido a que se debe trasladar 127 kilómetros y subir más de mil 100 metros de nivel cuesta por metro cúbico alrededor de 17 pesos. Esto contrasta enormemente con la tarifa que se cobra, que es de dos pesos por metro cúbico.

La operación de las plantas, de las cuales la más pequeña tratará medio metro cúbico por segundo y la de mayor capacidad saneará 34 metros cúbicos por segundo (se perfila como la "más grande del mundo"), permitirá, además de la recarga del acuífero, que se dejen de verter aguas sucias en el gran canal de desagüe, señaló.

En el área se consumen aproximadamente 70 metros cúbicos de agua por segundo, pero de ellos unos 50 se explotan en el valle de México. De éstos sólo se recargan, mediante el agua de lluvia, unos 23 metros cúbicos, por lo cual el déficit es de 27 metros cúbicos. "Como está 10 metros por debajo del nivel del lago de Texcoco se generan hundimientos diferenciales que andan por los 20 centímetros al año."

El funcionario abundó que el líquido que se explota en el valle de México se extrae mediante baterías de pozos. Las principales están en Xochimilco, una de las áreas con mayor hundimiento. Agregó que la mayor cantidad del agua utilizada en la actualidad se saca por cuatro lados. Se arroja hacia el norte del valle de México, al río Tula, y de ahí se va a los distritos de riego.

Con este líquido se riegan unas 100 mil hectáreas, en las cuales, por la cantidad de agentes patógenos que lleva, está prohibido sembrar hortalizas. Pero eso podría cambiar si las aguas son tratadas, y si se logra potabilizar se podría inyectar a los acuíferos y reutilizarla.

Por lo que concierne al Proyecto Lago de Texcoco, explicó que a 31 años de que se inició el programa de recuperación, estudios realizados por universidades de Estados Unidos y Holanda indican que al reducir 10 por ciento el índice de partículas suspendidas en el aire -lo que hasta ahora han logrado las obras- se disminuye la mortalidad de la población uno por ciento y la morbilidad entre uno y 3 por ciento. Por ello, dijo, "cada peso que se invierte en el lago de Texcoco o en su cuenca tributaria remunera alrededor de mil 100 pesos, pues evita unas 200 mil muertes".

En los años 70 las tolvaneras en la capital no sólo afectaban la salud de los capitalinos (el polvo estaba cargado de detritos), sino que afectaba las actividades económicas, pues por ejemplo el "Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, que está a siete kilómetros del lago, debía cerrarse casi dos horas alrededor de 60 veces al año".

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