Respalda el PRD la decisión; "le están haciendo pagar al tricolor sus fechorías"

Hoy ratifica el IFE sanción contra el PRI

La multa de mil millones de pesos es la más elevada que ha aplicado el órgano electoral

ALONSO URRUTIA

En medio de acusaciones cada vez más fuertes contra el Instituto Federal Electoral (IFE) y su presidente, José Woldenberg, se espera que el Consejo General del organismo apruebe hoy en definitiva la multa de mil millones de pesos al PRI. Al menos siete consejeros están convencidos no sólo de las razones de la sanción, sino también del procedimiento por el cual se llegó a esta conclusión.

Sin embargo, se prevé una intensa sesión pues, por diversas motivaciones, los consejeros Jaime Cárdenas y José Barragán han externado su inconformidad con la resolución, sobre todo por cuestiones de procedimiento, en el caso del primero, y de profundización en el expediente en opinión del segundo.

Quien ayer adelantó su respaldo al dictamen fue Pablo Gómez, representante del PRD y promotor de la demanda: "Estamos muy satisfechos de que el IFE haya logrado finalmente comprobar que el PRI recibió el dinero del sindicato petrolero y con ello trasgredió las normas de la contienda y provocó desigualdad".

Gómez reprochó a quienes a partir de algunos puntos que no pudieron comprobarse en este momento -como la desviación de recursos públicos de Petróleos Mexicanos (Pemex) al PRI- esgrimen argumentos contra el dictamen y con ello avalan la trasgresión de la legalidad.

La multa que se aprobará hoy es la más elevada aplicada por el organismo, pues hasta ahora la mayor había sido de cerca de 20 millones de pesos contra el Partido de la Sociedad Nacionalista por manejos financieros irregulares.

Entre los consejeros que votarán en favor está clara la lógica con que actuó la Comisión de Fiscalización: se sancionó al PRI por lo que se tenía plenamente comprobado, para evitar que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación pudiera echarlo abajo, y eso fue la corroboración de que los recursos ingresaron al PRI y se violaron los topes establecidos por el propio partido relativos a las aportaciones de las organizaciones.

Es así que por ahora, explican consejeros, algunas imputaciones no se sancionaron, como es el caso de la violación al tope de campaña. Si bien se comprobó el ingreso de recursos al PRI, el hecho de que haya sido dinero en efectivo impide dar seguimiento al movimiento, como en el caso de que se trasladaran desde una cuenta bancaria, esquema al que están obligados los partidos.

Así, en el razonamiento de la Comisión de Fiscalización no hay forma de establecer la conexión específica de dónde se gastaron esos recursos, pues pudieron aplicarse a la campaña presidencial, a la de diputados o a la senatorial.

En ese caso se encuentran otras irregularidades como el Sorteo Milenio Millonario y la aportaciones privadas mediante las asociaciones Impulso Democrático y Nuevo Impulso. Ello no implica que subsecuentemente, si hay más elementos, el IFE no pueda sancionar al PRI.

Para Pablo Gómez el comportamiento del IFE ha sido satisfactorio y por ello el PRD respalda la multa de mil millones de pesos. "Se pierde de vista que el elemento fundamental, el ingreso de recursos del sindicato petrolero al PRI, está comprobado y es suficiente para sancionarlo."

Gómez rechazó que el IFE estuviera obligado a probar ahora otros aspectos de la queja, como es la desviación de recursos públicos, toda vez que el uso de dinero de Pemex en la campaña del PRI está todavía dirimiéndose en los juzgados. "Cuando judicialmente se pruebe que hubo esa anomalía, el PRD volverá al IFE para demandar que se sancione al priísmo por otra violación a normas electorales".

Quienes argumentan en favor de que el IFE debió aguardar más están asumiendo la defensa del PRI, pero el instituto no tendría por qué detenerse a probar algunas cuestiones, que quizá nunca se logre, y con ello dejar de sancionar al PRI por algo que está plenamente documentado.

Recordó, por ejemplo, que la documentación de los egresos de ese partido fue destruida y esa era la que comprobaba el gasto de los 500 millones de pesos.

"El IFE está haciendo pagar al PRI por una parte de sus fechorías, pero eso no elimina que se sancione de nuevo a ese partido si se comprueban otras", señaló.

Previene al PRI sobre daños irreparables por la multa

Caerán votación, curules y recursos, alerta Madrazo

Crítica de Peschard al fallo, entre las pruebas recabadas

ENRIQUE MENDEZ

El presidente del PRI, Roberto Madrazo Pintado, aceptó que la multa de mil millones de pesos que le impondrá el Instituto Federal Electoral (IFE) "causará un perjuicio no reparable" al tricolor, pues no sólo caerá su porcentaje de votación en las elecciones del 6 de julio, que incidirá en un menor número de diputados priístas, sino que también se reducirá su financiamiento público de los próximos tres años.

"La sanción, arbitraria e ilegal, acarreará serias repercusiones de índole política que pueden trascender en las expectativas de votación del 6 de julio, situación que afectaría el número de diputados de mayoría relativa y de representación proporcional", advirtió el dirigente en una carta que envió a los presidentes de los comités estatales, legisladores y "distinguidos militantes" de su partido.

En el documento, Madrazo describió un panorama adverso para el Revolucionario Institucional, contra el que hoy el IFE ratificará la sanción económica por una falta administrativa, aun cuando la investigación al partido se inició por la presunción de delitos electorales. El efecto de la multa, señaló, no sólo implicará un menor número de diputados priístas en la 59 Legislatura.

"Trastocará intereses a mediano y largo plazos, ya que al impactarse la votación que podemos recibir, también se causa un menoscabo en el financiamiento que nos corresponderá para los próximos tres años, sobre todo si entendemos que éste se da en función de la votación asignada a cada partido político, (como) resultado del proceso electoral anterior inmediato."

A lo largo de la carta -de la cual también se envió copia a la secretaria general, Elba Esther Gordillo; al secretario de Elecciones, César Augusto Santiago; al coordinador jurídico, Miguel Angel Yunes, y al representante del PRI en el IFE, Rafael Ortiz Ruiz- Madrazo insistió en que el tricolor "de ninguna forma incurrió en conducta alguna transgresora de la norma" electoral y mantiene el señalamiento de que el insituto sancionará al partido con "elementos de convicción imperfectos e incompletos".

"Partícipe y parte actora"

El dirigente priísta acusó al órgano comicial de haber modificado su papel de árbitro por el de "partícipe y parte actora" de las elecciones. Esa actitud, dijo, obedece a una serie de "acciones orquestadas desde altos niveles del actual gobierno y que significan, sin lugar a dudas, una elección de Estado avalada por los integrantes del IFE, con el afán probable de justificar su permanencia mediante la aplicación de una ilegal sanción" al partido.

Por el contrario, acusó, con su conducta "obtusa y limitada" los consejeros favorecen "de manera directa o indirecta a determinado partido político, como en el caso de Acción Nacional, en el asunto conocido como Amigos de Fox, que no se tramita con la misma celeridad".

Esto demuestra, agregó, que los consejeros electorales actúan con "discriminación, trato desigual y, por tanto, injusto". Es, insistió, una conducta parcial "en franco perjuicio de un partido político y en beneficio de otro".

La víspera de que se confirme el dictamen de la Comisión de Fiscalización, Madrazo dijo que la sanción -equivalente a 60 por ciento de los ingresos que recibiría el PRI este año- "causará un perjuicio y menoscabo para el partido que influirá de manera desfavorable en la próxima contienda electoral y, consecuentemente, en la votación que recibirá, situación que no es reparable mediante mecanismo legal alguno".

Mientras tanto, el PRI se prepara para defenderse en varios frentes.

Ayer el equipo jurídico del PRI continuó integrando el recurso de apelación que presentará ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación. Miguel Angel Yunes informó que dentro de las pruebas que se entregarán a los magistrados está la copia en videocinta de una entrevista que la consejera Jacqueline Peschard concedió ayer a la periodista Ana María Salazar, de la cadena MVS, en la que -afirma el abogado del priísmo- reconoció que no hay pruebas que sustenten el dictamen. Por la noche se presentó en la sede nacional del PRI un notario público para dar fe de la autenticidad de la grabación del programa y de las declaraciones de Peschard, que se transmitieron después de las 21:30 horas por el canal 52 de la empresa referida.

Durante el día Yunes se reunió en dos ocasiones con Madrazo, mientras que por la tarde en la sede nacional del partido se presentaron el senador Fidel Herrera Beltrán, representante priísta en el Consejo General del IFE, y los diputados José Carlos Ramírez Marín y Jaime Vázquez, quienes anunciaron que los legisladores del PRI utilizarán "hasta el último recurso" legal para proteger a su partido.

Ramírez Marín, vicecoordinador de la bancada priísta en San Lázaro, informó que los diputados iniciarán un juicio político contra el presidente del IFE, José Woldenberg; el presidente de la Comisión de Fiscalización, Alonso Lujambio, y los consejeros Jesús Cantú y Gastón Luken por convertir al instituto electoral en el "brazo oficioso y jurídico del PAN y de la Presidencia de la República", aun cuando se presenten como "los príncipes de la democracia".

Fidel Herrera anunció que se impulsará entre las bancadas del Congreso "darle velocidad" al análisis de la iniciativa que pretende acotar los márgenes de acción del IFE, "porque mete la mano en los procesos internos de los partidos" y ha convertido el Pemexgate en "un ajuste de cuentas" contra el PRI.

Por último, en tono burlón y en referencia a las fricciones del martes por la noche, cuando se restringió el acceso a los priístas a la sesión de la Comisión de Fiscalización, Herrera Beltrán dijo que para que hoy los consejeros electorales no se espanten, el PRI "hasta le va a dar el día libre a las secretarias. No sea que vayan a llamar al Ejército".