El siguiente paso, que emitan su voto desde el exterior
Eliminan plazo para que migrantes puedan recuperar su nacionalidad
ANDREA BECERRIL
El Senado de la República aprobó ayer reformas constitucionales por las que se posibilita que quienes hayan adoptado otra nacionalidad conserven al mismo tiempo la mexicana y puedan llevar a cabo los trámites necesarios en cualquier momento.
Con ello esa cámara corrigió la limitación que se había impuesto hace cinco años, cuando el Congreso legisló en torno a la doble nacionalidad, pero impuso un plazo para recuperar la ciudadanía mexicana, que venció el pasado día 20.
La semana pasada, el Senado regresó a la Cámara de Diputados una iniciativa de ley encaminada también a eliminar el plazo de cinco años, ya que sólo proponía modificar la Ley de Nacionalidad. Las comisiones dictaminadoras argumentaron que era necesario además reformar los artículos 30, 32 y 37 constitucionales.
De inmediato, el senador priísta Adrián Alanís presentó una iniciativa en ese sentido, que ayer fue aprobada. Con ello, se señala en el dictamen, se beneficia a 5 millones de mexicanos que residen fundamentalmente en Estados Unidos y que adquirieron esa nacionalidad o son hijos de mexicanos nacidos en el vecino país del norte.
Alanís expuso en tribuna que los legisladores asumieron una responsabilidad solidaria y justa con los trabajadores migrantes, al pemitirles que puedan ejercer plenamente sus derechos como mexicanos en el país en que residen.
Igualmente, el perredista Raymundo Cárdenas resaltó el hecho de que se haya pagado "una vieja deuda" que tiene el país con quienes se han visto obligados a emigrar a Estados Unidos mediante la reposición plena de sus derechos. El siguiente paso, resaltó, es permitir que puedan votar en el extranjero.
La iniciativa se aprobó por 97 votos a favor, ninguno en contra y fue turnada a la Cámara de Diputados.
Durante la sesión de ayer la fracción del PRI presentó una iniciativa de reforma a la Ley de Imprenta, con el objeto de garantizar trato digno a los pueblos indígenas y a los demás sectores de la sociedad. En tribuna, Dulce María Sauri destacó la necesidad de introducir en el marco jurídico, junto con la prohibición de atacar la vida privada, la moral y la paz pública, el impedimento de que los medios electrónicos o escritos difundan expresiones de agravio o desprecio a la cultura, los usos y costumbres o los derechos indígenas.
Hizo notar que de acuerdo con un estudio reciente de la Secretaría de Relaciones Exteriores, 90 por ciento de la población padece algún tipo de discriminación, especialmente las mujeres, los discapacitados y los grupos indígenas, y de ahí la necesidad de reformar la Ley de Imprenta.
