Directora General: Carmen Lira Saade
México D.F. Jueves 10 de abril de 2003
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Espectáculos

Utilizaron la pared de una casa semiabandonada ubicada en Insurgentes Sur 3874

El grupo Arte en guerra contra la guerra suma una barda más a su protesta

El domingo pasado plasmaron sus ideas sobre la situación actual entre EU e Irak

JAIME WHALEY

mural_02Sobre la pared exterior de una casa semiabandonada en Insurgentes Sur, frente al Instituto de Neurología, en la curva peligrosa, junto al Deportivo Vivanco, el grupo plástico El arte en guerra contra la guerra se afanó todo el domingo pasado, mientras la luz solar lo permitió, en plasmar sus ideas sobre la disyuntiva actual: la paz, legítima aspiración de la mayoría, o la guerra, turbio negocio para unos cuantos.

El largo muro, más o menos 60 metros de largo por una altura que se eleva en uno de sus extremos a cerca de los cuatro metros pero que no tiene menos de 350 centímetros en su parte más baja, y en el que hace años se anunciaba una avena, exhibe desde el lunes los mensajes de los artistas, "la sensibilización visual", como le puso Raúl Sosa, uno de ellos, naturalizado ya mexicano pero oriundo de Montevideo, Uruguay, que se dedica a la escultura y la cerámica, pero que contribuyó también con su pincel en la obra tanto policromática como en negro, el lado de la guerra.

El voto en favor de la guerra es indigno, cobarde, cómplice y genocida, es lo escrito en uno de los ángulos superiores, luego que en la porción bélica de la obra aparece una calavera ataviada con el sombrero de las barras y las estrellas emblemático del Tio Sam: la huesuda sostiene en una mano al mundo y en la otra blande un puñal. Hay un avance de soldados con cascos con suásticas y otra consigna: No más sangre por petróleo, que retocaron Oswaldo Caldú y Guillermo Scully.

En la porción pacifista, sentencias como No en nuestro nombre, libros sí, bombas no son amparados por el universal signo de la paz: una gran paloma blanca. "Es una idea de todos, los dos polos. Cada quien pone lo que le dicte la inspiración", explicó Alberto Venegas, quien puso un relieve que representa el espíritu lacerado del hombre. Y acota que los artistas no se dividen en guerreros o buscadores de paz, para que no existan malas interpretaciones.

Los artistas, que desde temprana hora del domingo rasquetearon la deteriorada pared, un día antes habían pintado con letras grandes No a la guerra, declaración que fue efímera pues nada más intentaban señalar que ahí, además del rechazo, se haría esta protesta que en alguna forma retoma la gran tradición muralista mexicana. Esperan que se imite su ejemplo en otros muros, pues reconocen que el ataque a Irak no tiene otro fundamento más que la avidez por el petróleo y la dominación imperialista. La dirección es Insurgentes Sur 3874.

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