El boliviano desconoce si su traspaso costará un millón de dólares

Llegó Joaquín Botero para dar a Pumas los goles que le faltan

Hoy le practican más exámenes médicos para determinar si se queda en el club auriazul

A los 25 años de edad la FIFA lo reconoció como el máximo anotador en 2002 con 49 tantos

JORGE SEPULVEDA MARIN

El goleador boliviano que se agregaría al ataque de Pumas, Joaquín Botero, llegó a la capital del país a las seis horas de ayer y a las 14 horas le hicieron estudios radiográficos en un hospital privado.

Botero desconoce qué tan avanzadas se encuentran las pláticas entre la directiva del Bolívar y el cuadro mexicano, pero aseguró que esta vez hubo un mejor ofrecimiento económico de la UNAM que en el primer acercamiento y sólo faltarían por arreglarse algunos detalles.

Botero respondía las preguntas como si rezara; con voz apenas audible. Agregó que está motivado para jugar en México y opinó que Pumas "juega muy bien, tiene un buen manejo de balón".

Luego de un año de ser pretendido por el cuadro auriazul, el boliviano dejó en claro su deseo de ser dirigido por Hugo Sánchez.

- A Pumas le hacen falta goles, Ƒtú se los podrás dar?

- Sí, claro, para eso es que estamos acá, lo importante es que se concrete la posibilidad de jugar y ya luego veremos.

Aliviado completamente de una molestia que tuvo en el tobillo izquierdo hace unas semanas durante la disputa de la Copa Libertadores, precisamente ante UNAM, el mejor goleador del mundo en 2002 con 49 tantos y ganador del Balón de Oro de la Federación Internacional de Estadística e Historia de la FIFA, aseguró estar en inmejorables condiciones físicas y listo para integrarse al plantel.

El jugador de 25 años de edad confirmó que los 49 goles hechos en una temporada lo hicieron atractivo no sólo para un equipo, pero dijo ignorar si su carta es cara o no, porque eso lo maneja el Bolívar.

-Se dice que piden un millón de dólares por tu transferencia.

-No lo sé.

Botero, quien se definió como un delantero que siempre está en el área rival aprovechando sus oportunidades, se dijo consciente de la presión a la que será sometido por su fama de goleador y más porque viene a un equipo tan grande.