México D.F. Miércoles 4 de junio de 2003
Señalan el riesgo de que se conviertan en instrumentos del poder económico
Critican especialistas la concentración en la propiedad de medios informativos
Evalúan en un foro la importancia que poseen en el establecimiento de la democracia
CAROLINA GOMEZ MENA
En la actualidad muchos medios de comunicación "han perdido su alma, han olvidado su función social y se han convertido en meros consorcios empresariales". Por ello, y ante la tendencia a su concentración en pocas manos, "urge que comiencen a reorientar su papel, porque de no hacerlo corren el riesgo de convertirse en instrumentos del poder económico y político, más aún cuando tienen un poder determinante en el establecimiento de la democracia".
Las anteriores fueron algunas de las reflexiones expuestas durante la inauguración del foro Medios de comunicación y democracia en América Latina, organizado por el Centro Nacional de Promoción Social (Cempros) y el Centro Nacional para la Democracia en América Latina de la Fundación Konrad Adenauer.
En el foro participó como ponente el periodista de La Jornada Arturo Cano, director del suplemento Masiosare, quien destacó que entre ciertos sectores nacionales existe una marcada tendencia a magnificar el poder que tienen los medios en el logro de la democracia e incluso a "mitificar" su papel.
"No se puede exigir a los medios que se conviertan en la vanguardia de un proceso de transformación si los partidos, la sociedad civil y los sindicatos van a la saga o viven en un mar de contradicciones. En cierta medida tienen la responsabilidad de trabajar por la equidad en la promoción de una cultura de justicia y legalidad. Pero tienen esta responsabilidad, tanto como la poseen otros sectores, y a cada quien le toca la suya".
Cano descartó que los medios se hayan convertido en un "dolor de cabeza permanente" para el gobierno, aunque así pareciera que se percibe por los "habitantes de Los Pinos.
"Es verdad que en lo que aborda un medio incide la propia agenda que tenga, pero no son sólo el reflejo de ello, si no por sobre todo lo son del conjunto de fuerzas y factores que se expresan a través de los medios".
Agregó que darles un "papel mítico o casi mágico es esperar mucho de ellos, porque son sólo un factor. Esperar que sean los que jalen el tren de transición no sólo es un sueño guajiro, sino que es desnaturalizar su función, y hay casos patéticos, como el de Venezuela, en donde los medios se convierten en el principal actor político, y ahí tenemos el desastre venezolano".
Por su parte, José Merced González, director general de Cempros, lamentó que muchos medios de comunicación "responden a quien los paga, en lugar de servirle a la sociedad", por lo cual "están distorsionando su labor".
En el caso de México, González sostuvo que ciertos medios "trabajan más en favor de los intereses de sus dueños; hay muy pocos que siguen respondiendo a su misión, a su dimensión ética y social, han dejado de lado los intereses y las necesidades del pueblo".
Según el dirigente del Cempros, en América Latina paulatinamente los medios "han ido perdiendo su función de ser vínculo entre los requerimientos de la sociedad y los gobiernos".
En opinión de Cano, en México los medios son el reflejo tanto de los avances que ha habido en la democratización, como de los "retrocesos y torpezas". Consideró que pese a lo que piensan algunos sectores, los medios "sí informan, aunque con los asegunes de siempre". También criticó el hecho de que se ejerza un periodismo "muy cargado a las declaraciones". |