México D.F. Sábado 28 de junio de 2003
EL ECO Y LA SOMBRA
Ricardo Yáñez
Pausas
¿Y SI DIOS, nada más, fuese lenguaje?
ACTUAR DESDE UNA prudencia inspirada, detenerse
desde una precipitación asentada.
SINTONIZAR LA VOZ de quien habla, sintonizarla
lo mejor posible -algo más que escuchar.
DEJA QUE LA imaginación se haga cargo de
ti, no te hagas cargo tú de tu (y menos de la) imaginación.
APRENDER ES OLVIDAR que se sabía, o quizá
-no hay por qué no estar de acuerdo con los grandes- recordar que
se sabe.
¿POETAS DE la escritura? ¡Escritores!
¿POR QUE EN la palabra escritor siempre
oigo un grito?
SUFRIR PARA MERECER -ese mismo sufrir.
LOS VERSOS NO son versos: es aliento poblado de
silencios.
LEER NO ES descifrar, es entender; pero no es entender,
es entender que somos -estamos siendo- entendidos.
LA POESIA NO es canto, parece canto, pero es sólo
aliento entonado -frontera con el canto.
UNA FLOR SE abre, un verso se dice.
LA EXTRAÑEZA DEL verso la constituye, curiosamente,
la sencillez -estremecedora- de su (siempre, si no no sería verso)
descubrimiento.
HABITAR NO UNA voz, habitar (¡no, tampoco!)
el vacío de esa voz: habitar... ¿el habitar?
DEJARSE SER NO es dejarse, es ser.
LA ESCRITURA SUELE ser una estrategia, mientras
la voz una entrega.
''NO HACIA SILENCIOS, sino pausas, que es muy distinto":
Federico Campbell.
TENGO, GRACIA Y desgracia, mucho sentido del tiempo,
de los tiempos. Sé lo que va a venir, sé cómo viene.
Lo que no sé, dijo, no, no es cómo lo sé, sino cómo,
sabiéndolo, casi no le hago caso.
¿OBEDIENCIA AL misterio de los tiempos es
abismarse en la armonía de las esferas?
SOÑE VARIOS ALACRANES. Según un diccionario
de sueños eso significa amistad traicionera. No mataba yo a los
alacranes. Los dejaba vivir para no traicionar mi amistad traicionada.
CON LA POESIA no se puede hacer sino poesía;
pero eso, en efecto, se puede. Así que adiós a los discursos
sobre su inutilidad.
EL DESALMADO -por actuación no por condición-
de Luis Cortés Bargalló me muestra un poema de Carlos Martínez
Rivas (página 29 de Poemas sueltos, colección El pez
en el agua, edición y nota de Miguel Angel Echegaray).
LEO TRES VERSOS y lo suelto, más el libro
que el poema. Son como las cuatro y media de la tarde. Horas pasarán
para que lea completos los 15 versos (leí en la comida pues la quinta
parte).
SE TRATA, POR supuesto, de un poema, uno de esos
(los que valen) que no piden sino hasta como que impiden ser leídos.
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