Luis González Souza

Nuevo orden mundial zapatista

Ahora resulta que el IFE Atayde quiere bombardearnos con una serie de espots televisivos en los que nos da las "gracias" por supuestamente haber cumplido el sacrosanto deber cívico de votar el pasado 6 de julio. A nosotros que no nos den ningunas gracias, porque la verdad ni votamos. Lo cierto es que fueron las elecciones del desencanto, en las que lógicamente el abstencionismo fue la nota dominante. Seguro que éste rebasó 60 por ciento, pero las cifras oficiales y oficialistas del IFE nos quisieron convencer de que sólo fue 58.22 por ciento de incrédulos electorales y de hastiados con el "gobierno del cambio". Pero para eso están el IFE Atayde y sus sueldotes de megafuncionarios (Ƒmás de 100 mil pesos mensuales cada consejero?, Ƒo ya se acercan a los 200 mil?)

Mas no fue esa la única payasada del IFE Atayde en estas elecciones. Aparte de encubrir meticulosamente las cifras del abstencionismo real, dicho instituto tuvo a bien avalar un circo de tres pistas -México Posible, Fuerza Ciudadana, Convergencia, todos entorilados contra el PRD- en el que predominaron los trapecistas y los payasos de siempre. Por eso es el IFE Atayde, en memoria del histórico circo Atayde. Ya las elecciones en nuestro país son un circo, gracias a Fox y sus amigos, y no una "caja de resonancia" de las demandas más revolucionarias, como lo sugiriera el inolvidable Vladimir Illich Lenin alias Volodia.

Pero no estamos de humor para ir al IFE Atayde. Ya bastantes afrentas nos debe el "gobierno del cambio". Pablo Neruda escribió, autobiográficamente, el extraordinario libro Confieso que he vivido. Si hemos de ser honestos, nosotros debemos decir hoy: "Confieso que no he votado". Y no fue por otra cosa que por simple dignidad, la misma que nos han enseñado con creces nuestros hermanos, sí, indios zapatistas, desde que se alzaron en armas para decir a su manera, a principios de 1994, šbasta! Es eso precisamente lo que todos los abstencionistas quisimos decirle ahora a Foximiliano, como diría nuestro buen amigo Guillermo Briseño, y a todos los foxinómanos: šBasta de demagogia, basta de traiciones a las promesas electorales, basta de querer convertir a nuestro país en un nuevo Puerto Rico, basta de padres Amaros y todas sus travesuras!

Pero si queremos evitar al IFE Atayde, pasemos a cosas más importantes que las "elecciones intermedias" del foximato. El mundo se está cayendo, y nosotros entrampados en la ni tan justa electoral. Por eso Lenin decía que la lucha parlamentaria sólo sirve para expandir el impacto de las demandas verdaderamente revolucionarias. Pero en nuestro país, aquí y ahora, la verdad es que nuestros parlamentarios no representan bien ni a mi perro, tal como lo dije el lunes pasado en una entrevista con Radio Educación. Basta recordar la insensibilidad y la estupidez con que diputados y senadores, en lugar de aprobar la ley indígena que la mayoría queríamos, terminaron por aprobar una legislación francamente provocadora del resurgimiento de la guerra en Chiapas.

Pasemos, pues, a lo verdaderamente importante hoy. Mientras que aquí nos peleamos por saber quién de los cirqueros del IFE Atayde ganó tal o cual elección, Bush II insiste en sumir a todo el mundo en una nueva etapa de barbarie, más bárbara que ninguna otra. El dictadorcillo de Disneylandia insiste en atrapar al presidente de Irak. Estúpidamente cree que una vez atrapado el máximo dirigente de dicho país, el mundo perdonará sus estupideces belicistas, pero se equivoca: el mundo de hoy es otro. El mundo de hoy tiene la suficiente sensibilidad como para escuchar en serio, como lo ha hecho a través del movimiento de los "con dignidad", la revolución -más moral y hasta epistemológica, que militar- de los indígenas zapatistas orientados por el EZLN. Casi todo mundo sabe ya la disyuntiva de este siglo: o impulsamos un orden mundial en verdad nuevo, vale decir zapatista, o nos sumimos en la barbarie inaugurada por Bush II en Irak.

Obvia nuestra decisión: queremos un orden mundial nuevo, que abreve lo más que pueda de las enseñanzas de nuestros hermanos indios. Insistimos, no es mucho pedir: queremos un mundo simplemente intercultural, en el que todos quepamos, incluidos Bush II y Bin Laden, así como autonómico, en el que las autonomías, por cierto, no sólo de los pueblos indios, brillen a todas horas y por todos lados. Y finalmente queremos un mundo en el que la democracia verdadera, la del mandar obedeciendo, opaque y sepulte para siempre a la democracia payasa como la que el IFE Atayde pastorea, eso sí, con unos sueldazos que hasta el secretario de Hacienda envidiaría. Ya lo dijimos y lo decimos una vez más: queremos un mundo intercultural, autonómico y en el que el mandar obedeciendo sea la divisa de todos, en todos lados y todos los días.

ƑEs mucho pedir? Creemos que no. Pero al menos escapemos libre y legítimamente de elecciones como las que una vez más patrocinó la semana pasada el circo, perdón, el IFE Atayde. Si se abstuvieron como nosotros, salud y larga vida.

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