Dejan libre a sacerdote que colaboró con los militares en sesiones de tortura

Notifican a ex represores argentinos el pedido español de extradición

Pérez Esquivel y Abuelas de Plaza de Mayo respaldan a Kirchner "contra la impunidad"

AFP, DPA Y REUTERS

Buenos Aires, 7 de agosto. El ex dictador argentino Jorge Rafael Videla y otros ex represores asistieron hoy a una audiencia en la que el juez federal Rodolfo Canicoba Corral les notificó del pedido de detención con fines de extradición de la justicia española, al tiempo que un juez dejó en libertad al sacerdote y ex capellán policial Christian von Wernich, quien durante la pasada dictadura militar (1976-83) colaboró en sesiones de tortura a detenidos en campos clandestinos.

El juez de garantías Arnaldo Corazza hizo lugar al habeas corpus presentado por la defensa del ex capellán, detenido ayer por orden de la Cámara Federal de la ciudad de La Plata, luego que un fiscal lo acusó de "privación ilegal de la libertad, torturas y posible participación en homicidio".

A su vez, el juez Canicoba Corral realizó las "audiencias de conocimiento" con seis de los siete ex represores que había citado, ya que el almirante Emilio Eduardo Massera no concurrió por razones de salud, de acuerdo con lo argumentado por sus abogados.

Además de Videla, se presentaron Guillermo Suárez Mason, Jorge Acosta, Héctor Febres Méndez, Juan Carlos Rolón y Rubén Franco, para ser informados además de los delitos que se les imputan, que son "tortura y genocidio".

Los abogados de Videla -quien cumple arresto domiciliario- presentaron un escrito en el que consideraron que "el juez natural" del proceso es Canicoba Corral y no Garzón, e insistieron además en que Videla "ha sido juzgado y condenado" durante el juicio a las juntas militares de 1985, para ser luego indultado por el gobierno de Carlos Menem.

Quienes no pertenecieron a las juntas militares, se vieron beneficiados por las controvertidas leyes de Punto Final y Obediencia Debida, cuya constitucionalidad es analizada por la Corte Suprema de Justicia.

Por su lado, el premio Nobel de la Paz (1980), Adolfo Pérez Esquivel, y la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, respaldaron este jueves las "acciones concretas para terminar con la impunidad" que impulsa el presidente Néstor Kirchner sobre el pasado dictatorial del país.

"En esta corta gestión pero muy profunda y fructífera que está llevando el gobierno, se están cumpliendo viejos deseos, con acciones concretas, positivas y efectivas para terminar con la impunidad", dijo Carlotto tras reunirse con el jefe de Estado.

'"Siento que estoy al lado de mi hija, al lado de los compañeros de mi hija", agregó emocionada Carlotto, quien sigue buscando a su nieto Guido, hijo de su hija Laura, secuestrada cuando estaba embarazada en 1977, y asesinada después de dar a luz.

Por otro lado, unos 7 mil piqueteros bloquearon el tránsito en calles céntricas de Buenos Aires y puentes que unen la ciudad con la periferia, en la primera movilización significativa desde que asumió Kirchner el 25 de mayo pasado, para reclamar más planes de empleo y alimentos, y además la anulación de las leyes de Obediencia Debida y Punto Final.

Por otro lado, el Legislativo de la provincia de Buenos Aires aprobó el jueves la ley de expropiaciones que habilita la utilidad pública de los bienes muebles e inmuebles de la ex fábrica de alimentos Sasetra, para cederlos a una cooperativa de los trabajadores.