La procuraduría se suma al Protocolo de Estambul; regirá desde septiembre

Personal de la PGR podrá ser demandado por posible tortura

En septiembre próximo, agentes del Ministerio Público, peritos, elementos de la Agencia Federal de Investigación (AFI), así como médicos legistas y forenses podrán ser denunciados por cualquier persona que haya sido objeto de presuntos actos de tortura o maltrato.

Ayer se publicó en el Diario Oficial de la Federación el acuerdo mediante el cual la Procuraduría General de la República (PGR) deberá sujetarse al Protocolo de Estambul, que contempla la aplicación de un dictamen médico-sicológico para casos de posible tortura y/o maltrato.

Con el acuerdo número A/05/2003, firmado por el procurador Rafael Macedo de la Concha, la PGR asume el compromiso de que el personal de la institución pueda ser investigado cuando algún detenido denuncie que sus garantías individuales fueron violadas durante y después de su captura.

Además, el acuerdo señala que peritos o médicos legistas pueden solicitar que se efectúen exámenes a cualquier sujeto aprehendido, siempre y cuando existan indicios de que fue víctima de tortura por algún funcionario de la PGR. Macedo de la Concha estará facultado para ordenar esa práctica.

El acuerdo indica además que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) será la encargada de certificar que México y la PGR cumplan con el protocolo, el cual por primera vez se aplica en un país de América Latina.

El Protocolo de Estambul instruye a los subprocuradores de la PGR, al titular de la AFI, al coordinador de Servicios Periciales, así como a subdelegados de la dependencia en las entidades, para que supervisen la correcta aplicación del acuerdo y tomen las medidas necesarias en caso de incumplimiento.

El Protocolo de Estambul fue iniciado y coordinado por la Physicians for Human Rights y la Fundación Turca de Derechos Humanos con la colaboración de 75 expertos en derechos humanos. En él están representados 40 organizaciones de 15 países, incluido el Consejo Internacional para la Rehabilitación de las Víctimas de Tortura.

AMO