MEXICO SA

Carlos Fernández-Vega

Redición de fraseología del cambio

El Informe: nada, ni tiros ni sorpresas
Narración de pendientes en vez de hechos

NI TIROS, NI sorpresas, ni datos duros, ni nada: otro informe autocomplaciente, elaborado con frases utilizadas a lo largo de su ejercicio presidencial, aderezadas con pretextos vestidos de advertencias.

NADA, PUES, QUE no sea la redición de la fraseología del cambio, igualmente utilizada en los dos informes previos. Los mismos pretextos para justificar desde la carencia de resultados (no ha habido avance porque se mantienen en la congeladora las "imprescindibles reformas estratégicas que liberen el gran potencial de la nación, fortalezcan al Estado, generen recursos y condiciones que estimulen el crecimiento económico y transformen la incertidumbre en confianza para el futuro de nuestro país") hasta la defensa de los intereses de la nomenklatura financiera ("instruyo a las instancias competentes para que, apegadas puntualmente a la ley, realicen todas las acciones pertinentes con el fin de finiquitar el proceso de intercambio de pagarés Fobaproa-IPAB"), no obstante que reconoció que "el reclamo del país sigue siendo contra la impunidad".

SEÑALAR QUE "EL crecimiento económico y la generación de empleos han sido insuficientes" es tan vacío como reconocer que en los renglones anteriores "también ha habido avances", toda vez que tanto el crecimiento económico como la generación de empleos simple y sencillamente no se ha dado, realidad muy lejana a la "insuficiencia" aducida por el inquilino de Los Pinos.

LARGA NARRACION DE pendientes, en lugar de concreta relación de hechos. Sin duda, la tercera llamada, tercera, fue desperdiciada. En fin, choro mareador el del lunes que en nada contribuye a echar a andar al aletargado país, aunque a partir de esa fecha, y chin chin el que se raje, los fracasos foxistas deben ser asumidos como responsabilidad de la nación en su conjunto.

Y PARA DEMOSTRAR que su amenaza iba en serio, al día siguiente del "mensaje a la nación", el inquilino de Los Pinos pasó a la acción. El mero lunes, Fox señalaba que, "como titular del Ejecutivo, no escapan a mi sensibilidad los reclamos sobre mayor eficacia en el gobierno y desencuentros en el equipo de trabajo... Sé que nos reclaman falta de experiencia y una mejor gestión como gobierno en su conjunto. He instruido a todo mi equipo de trabajo a privilegiar la política para ubicarla en la posición de mando que le corresponde, hasta convertirla en el eje rector de una gestión de gobierno cada vez más eficaz, sensible y comprometida... México nos demanda mejores resultados. Reitero a mis colaboradores que estamos obligados a redoblar esfuerzos y a no perder de vista que el trabajo en equipo es condición indispensable para el buen gobierno".

EL RAYO VENGADOR del inquilino de Los Pinos se puso en acción, aunque como en muchos otros casos erró el objetivo. Ernesto Martens dejó de ser secretario de Energía y Víctor Lichtinger de Medio Ambiente y conexos. Si bien el empresario veracruzano avecindado en Monterrey no fue más allá de lo que de él se esperaba -de hecho nadie en el gabinetazo ha trascendido la expectativa-, a juicio del inquilino del presidente Fox el gran error del hasta ayer funcionario público fue no sacar adelante la reforma energética. Del ex waterpolista sólo puede señalarse que en su "mensaje a la nación" el mandatario destacó que "en los pasados tres años se han regenerado 550 mil hectáreas" de áreas naturales protegidas.

ASI PUES, EN la lista de urgencias del inquilino de Los Pinos sólo aparece la reforma energética, y para sacarla adelante designó a un destacado panista que, paradójicamente, ya demostró su incapacidad para llevar a buen puerto la instrucción que en ese sentido recibió de Vicente Fox.

COMO LIDER DE la bancada panista en San Lázaro, Felipe Calderón no pudo satisfacer la obsesión presidencial en materia energética. Pero no sólo eso, porque también falló en la concreción de la reforma hacendaria, y la laboral, y la de telecomunicaciones y tantas otras "líneas de acción" que han servido de pretexto para que el gobierno del cambio reporte falta de resultados y avances. El político blanquiazul terminó sentado en la silla principal de Banobras aguardando que lo ungieran como cardenal, por aquello de los equilibrios, según dicen. Su lugar lo ocupará Luis Pazos, el Miguel Angel Cornejo de los economistas y efímero vocero de la Secretaría de Hacienda.

FELIPILLO, PUES, VUELVE a la carga con renovado aire en su intento por sacarle las castañas del fuego a Fox y resolverle sus urgencias. Reforma energética que, junto con la hacendaria, la laboral y la de telecomunicaciones son "imprescindibles para liberar el gran potencial de la nación, fortalecer el Estado, generar condiciones que estimulen el crecimiento económico y transformen la incertidumbre en confianza sobre el futuro del país", según el Presidente de la República.

LAS REMOCIONES DEJAN claro que para el inquilino de Los Pinos los problemas más delicados pasan a último plano, es decir, la promoción del crecimiento económico y la generación de empleo. No puede tener otra lectura, ya que el propio Fox advirtió que "no escapan a mi sensibilidad los reclamos sobre mayor eficacia en el gobierno". Pero sí, sí se le escapan, porque si la decisión era hacer a un lado lo que no ha funcionado, los secretarios de Economía y del Trabajo, el empresario Fernando Canales Clariond y monseñor Carlos Abascal Carranza, ocupan las primeras posiciones.

SI HAY RENGLONES en los que el gobierno foxista reporta nulos resultados ésos son la generación de empleos y el impulso del crecimiento económico, por mucho que presuma una salud macroeconómica que, a la fecha, no ha servido de mucho para efectos de bienestar social.

ES AMPLIA LA relación de funcionarios que no dan el ancho, como Javier Usabiaga, que, si bien se esmera en el cuidado y apapacho de los grandes empresarios agroindustriales, mantiene abandonado al campo nacional, o Luis Ernesto Derbez, que privilegia las negociaciones comerciales y no la política exterior, o...

Las rebanadas del pastel:

OTRO CHISTE DEL cambio: Dice el vocero presidencial que los recién ungidos tienen "experiencia propia en los temas que les han sido encomendados"... Queda claro que la cabeza blanquiazul en San Lázaro no es Francisco Barrio, sino Elba Esther Gordillo, la diputada Armani.

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