Asciende a 953 mil 399 millones de pesos: Hacienda

Supera el costo de los Pidiregas el monto del rescate bancario

ROBERTO GARDUÑO Y JOSE ANTONIO ROMAN

El costo total de los proyectos de infraestructura productiva de impacto diferido en el registro de gasto (Pidiregas) asciende a 953 mil 399 millones 300 mil pesos y ese monto es más elevado que la deuda por el rescate bancario. Un documento elaborado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) especifica que los recursos destinados a planes de Petróleos Mexicanos (Pemex) suman 743 mil millones de pesos y para la Comisión Federal de Electricidad (CFE) 210 mil millones de pesos.

El estudio entregado a los integrantes de la Comisión de Presupuesto de la Cámara de Diputados por el subsecretario de Egresos de la SHCP, Carlos Hurtado, señala que el costo total de los Pidiregas hasta el año 2002 ascendió a 837 mil 902 millones 400 mil pesos, y en el presente la cifra se incrementó en 13.8 por ciento, con lo cual alcanza los 953 mil 399 millones 300 mil pesos.

Por lo que hace a Petróleos Mexicanos, de 1998 a 2003 se han autorizado 36 Pidiregas. 35 de éstos son de inversión directa y el restante a inversión condicionada en un proyecto de construcción de una planta de nitrógeno.

De los 35 Pidiregas en Pemex los recursos utilizados se destinaron al área de hidrocarburos con objeto de incorporar reservas; mantener la capacidad de producción en los campos donde ha declinado, y aumentarla en yacimientos con oportunidades de desarrollo; elevar la capacidad de procesamiento de gas natural conforme a los niveles de extracción esperados y los incrementos de la demanda; y adecuar la infraestructura de producción de refinados al tipo de reservas con las que cuenta el país mediante la reconfiguración del sistema nacional de refinación.

Mientras, en la CFE se han autorizado 151 Pidiregas, de los cuales 124 son de inversión directa y 27 de inversión condicionada, con un monto aproximado de 210 mil 500 millones de pesos. Las metas de esos proyectos, señala la SHCP, tienen que ver con la construcción de nueva infraestructura para generación, transmisión y transformación, con el fin de atender el crecimiento de la demanda, rehabilitar y modernizar las centrales eléctricas que actualmente están en operación, para incrementar su factor de disponibilidad, y "es importante destacar que por primera vez se utiliza esta modalidad de inversión para optimizar la infraestructura existente", se señala.

La inversión total en Pidiregas en Pemex para 2003 se calcula en 117 mil 933 millones de pesos, y en la CFE la cifra prevista es de 25 mil 248 millones de pesos. El incremento de los montos en comparación con los del año pasado tiene una explicación a decir de las autoridades hacendarias: "el avance de la inversión financiada durante enero-junio se explica por concursos declarados desiertos, desfases en los procesos de licitación y retrasos en la construcción de obras por condiciones climatológicas adversas".

Formas de financiamiento

Esa circunstancia, manifiesta la SHCP, obedece a que desde hace varios años la insuficiencia de recursos presupuestarios ha llevado al sector público a utilizar varias formas de financiar la inversión pública de manera extrapresupuestal. Y la suma de los recursos presupuestarios y de diversas fuentes se ha denominado inversión impulsada.

Es decir, la apertura a la inversión privada, reconocen las autoridades en su documento, ha crecido en forma sustancial al grado que casi alcanza dos puntos porcentuales del producto interno bruto (PIB) en el año 2003.

En 1994 la inversión presupuestal en Pemex y la CFE sumó el 3.3 por ciento del producto interno. En 2000 los recursos públicos para ese efecto se redujeron a 2.6 por ciento del PIB, y la extrapresupuestal se ubicó en 1.1 por ciento del producto interno. Tres años después, en 2003, la inversión impulsada creció a 1.8 por ciento, y la de origen gubernamental siguió a la baja, con 1.9.

La justificación de la SHCP sobre el valor de los Pidiregas es que éstos instrumentos de deuda pública "han permitido impulsar inversión adicional, para la cual no se cuenta con suficientes recursos presupuestarios; estos proyectos están sujetos a un riguroso procedimiento normativo para su autorización, ejecución y seguimiento; su impacto sobre las finanzas públicas es altamente positivo y, de no haberse utilizado este esquema, la producción de bienes y servicios energéticos hubiese sido significativamente menor".