Empleados demandan el pago de salarios atrasados y de su liquidación

Acusan al ex líder de los diputados del PRI en Guanajuato de encubrir malos manejos

El dinero destinado a gastos de la fracción llegaba a una cuenta personal de un asistente

MARTIN DIEGO CORRESPONSAL

Guanajuato, Gto., 26 de octubre. Personal de apoyo, asesores, choferes y secretarias de la bancada priísta de la pasada legislatura estatal reclamaron sus pagos correspondientes a dos meses de trabajo y liquidaciones. Asimismo, acusaron al ex coordinador parlamentario del PRI, hoy vicepresidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados federal, Francisco Arroyo Vieyra, de permitir malos manejos de su operador financiero, Juan Carlos Salazar Herrera, en fondos destinados a cubrir los gastos operativos de la fracción legislativa.

Entretanto, varios ex diputados locales que concluyeron sus labores el pasado 25 de septiembre, quienes solicitaron el anonimato al igual que los ex trabajadores, afirmaron que no se les entregó un informe detallado de las prerrogativas, gastos y servicios a los que tenían derecho durante sus tres años de gestión. "El asunto estalló al final (de la legislatura anterior), cuando nos dimos cuenta de que teníamos asignados dos aparatos de radiocomunicación y que sólo nos dieron uno; al preguntar quién los tenía, nos enteramos que fueron usufructuados por los hijos, la esposa y parientes del diputado (Arroyo Vieyra)", señaló uno de los ex legisladores inconformes.

Pese a que durante la 58 Legislatura de Guanajuato los diputados firmaron un punto de acuerdo para no revelar el monto total de sus percepciones "por motivos de seguridad", algunos de los ex diputados afirmaron que, además de la dieta mensual de 45 mil pesos, su coordinador recibió cada 30 días prerrogativas individuales para sus correligionarios ubicadas en 58 mil pesos para gastos médicos, 17 mil para servicios mecánicos, refacciones, gasolinas y pago de casetas; 10 mil para gastos de representación, y 25 mil "para ejercer éstos.

"Nosotros desconocíamos cómo era aplicado ese recurso, de hecho a nosotros nos entregaban la dieta mensual y teníamos que ir a buscar para nuestros gastos, pero desconocíamos que le eran entregados recursos al líder de la fracción", dijo un ex legislador. El informante señaló que su coordinador parlamentario usaba el dinero "de manera discrecional", y que en caso de reportarse remanentes no era obligatorio que los diputados los reintegraran "porque el recurso ya estaba presupuestado".

Debido a esa falta de transparencia en el ejercicio de los recursos destinados al grupo parlamentario del PRI, hoy varios ex empleados y personal de apoyo de legisladores reclamaron sus pagos correspondientes a dos meses de trabajo y a su liquidación que, según personal administrativo en funciones, ya fueron cobrados.

Uno de los inconformes mostró al corresponsal de La Jornada en Guanajuato un cheque por concepto de pagos por servicios profesionales, extendido por el operador financiero de la bancada priísta, Juan Carlos Salazar Herrera, con número de cuenta 803013764 de Banorte. "Cuando lo fui a cobrar no tenía fondos", dijo.

El trabajador recordó que las partidas entregadas mensualmente al líder de la fracción priísta "eran depositadas a la cuenta personal de Salazar y no a una cuenta común de la fracción como los otros partidos, y, por eso, cuando nos dieron el cheque de julio por sueldos, no desconfiamos, siempre nos pagaban así".