Nacionalismo demagogo de Herrerías tras 10 años de premeditado coloniaje

Sólo toreros mexicanos, un español y un venezolano en la próxima temporada

Nadie pudo impedir que continuara el fraude taurino con el derecho de apartado

LEONARDO PAEZ

En el país del todo se vale, el intocable de la Plaza México ataca de nuevo. Ya no con mentadas de madre y amenazas de muerte a jueces timoratos y a soliviantados matadores, sino negándose a entregar en la delegación Benito Juárez los contratos firmados con toreros y ganaderos que le solicitó el nuevo delegado Fadlala Akabani, con el objetivo de autorizar o no la venta del derecho de apartado.

Sin embargo, la reiterada complacencia del anterior delegado panista José Espina y de su directora jurídica, Eva María Aviña, hacia la empresa de la Plaza México, rindieron sus frutos, y un día antes de dejar el cargo autorizaron la venta del derecho de apartado para la próxima temporada "grande", así como los incrementos respectivos en el precio de éste, no obstante que los matadores mexicanos que integran el elenco reciben honorarios hasta 10 veces menores que los españoles, quienes, según la delirante versión de Herrerías, no quisieron venir "por apoyar a Enrique Ponce y por carecer de garantías para torear en la México".

En el fondo, Ƒa qué obedece esta enésima negativa del promotor a presentar en la delegación contratos firmados con matadores, ganaderos y subalternos? A que en las anteriores 10 temporadas "grandes" por él organizadas, cuando ha presentado contratos, o éstos vienen en blanco o presuntamente falsifica la firma del matador o de su representante, como en el caso de Enrique Martín Arranz, apoderado de José Tomás, anunciado las dos temporadas anteriores y al que a la postre nunca contrató, pero por el que cobró en el derecho de apartado.

Ahora, como el Gobierno del Distrito Federal sí quiere que haya temporada, el menguado serial comenzará el próximo domingo, a pesar de que, según el artículo 43 de la Ley para la Celebración de Espectáculos Públicos en el DF, Herrerías debió registrar en la delegación los contratos firmados con los ganaderos a principios de junio y con los matadores a mediados de septiembre. De ahí su renuencia a presentarlos a la nueva administración delegacional. Pero en el espíritu de la transición democrática, intereses matan legalidad.

Elenco mostrenco

Si el intocable de la México confesó públicamente que "no es su obligación hacer toreros", Ƒcómo pretende anunciar diestros nacionales con imán de taquilla?

Sin ceder en su afán de que las autoridades levanten a su cuate Ponce la sanción que le impide torear en la México hasta el 22 de abril de 2004 -Ƒpor qué ese jueves no se organiza la corrida de la Oreja de Oro, digamos con un encierro de José Julián Llaguno, y corresponde el valenciano a tanto entreguismo de empresa y toreros?-, y luego de 10 años de contratar, sin otro criterio que la dependencia, a toreros españoles buenos, regulares, malos y pésimos, Herrerías alardea de promotor taurino nacionalista y anuncia, estén o no contratados, a 10 jóvenes y a cuatro vitalicios mexicanos, así como al español Pablo Hermoso de Mendoza -lesionado ayer- y al venezolano Leonardo Benítez.

Los vitalicios son Miguel Espinosa, con apenas 26 años de alternativa, y Eulalio López, con sólo 17 -ambos afanosos agentes de Herrerías en la manipulada Asociación de Matadores-, el primero con una desgana inversamente proporcional al apodo que ostenta, y el segundo instalado ahora en torero "de clase", así como el deslavado Jorge Gutiérrez, ya con un cuarto de siglo de alternativa, y el temperamental jinete Rodrigo Santos, con 13 años de doctorado.

Los 10 coletas restantes son Rafael Ortega, sistemático cortador de orejas en la México, pero sin acabar de adquirir un sello por el que se le recuerde; José María Luévano, con un interesante segundo aire la temporada pasada; Uriel Moreno, El Zapata, que no acaba de dar el estirón, al igual que Ignacio Garibay, Fermín Espínola, Alfredo Gutiérrez y Jerónimo, con cualidades todos, pero sin hambre suficiente para mandar a su casa a los que aún figuran. Confirmarán su alternativa Alberto Huerta, José Luis Angelino y Fabián Barba.

Las ganaderías, como dijo el empresario, "son las que piden los matadores", incluidas desde luego las de Reyes Huerta y Julio Delgado, en bochornosa compensación por haber tragado en el sainetazo de la corrida del 5 de febrero. La paráfrasis entonces se vuelve obligada: esta afición aún no se cansa de tanta pinche transa.