El capitán de los de Coapa anotó los dos tantos; Walter Gaitán marcó por la UANL

Con gol olímpico de Pável Pardo, América derrotó 2-1 a los Tigres

Los universitarios siguen en la cima del grupo tres; las Aguilas renuevan la esperanza de calificar

Jugadores y cuerpo técnico de los felinos protestaron contra el arbitraje por la anulación de un gol

MARLENE SANTOS A.

Tigres despotricó contra el arbitraje por la anulación de un gol que hubiera significado el empate, pero lo cierto es que ayer el América se impuso 2-1, los dos tantos de Pável Pardo, uno de ellos olímpico, y gracias a la destacada actuación del portero Gustavo Campagnuolo la UANL no recibió una dosis mayor de goles.

Aguilas se confirmó en el tercer lugar del grupo dos y renovó la ilusión de lograr la calificación directa a la liguilla en la recta final del torneo. Pese a la derrota, los felinos se mantienen en la cima del tercer grupo, aunque perdieron el liderato general.

El estadio Azteca registró una pobre entrada, no obstante la jerarquía de la visita, con apenas unos 30 mil aficionados.

Tigres de nuevo tuvo un bajón en el rendimiento como visitante, sobre todo en el segundo tiempo, cuando se acentuó el dominio de los americanistas.

Al minuto 28 el silbante Germán Arredondo marcó al revés una falta sobre Antonio Sancho, dio el esférico al América, que mediante un tiro directo cobrado por Pardo impuso el 1-0. El disparo era accesible para Campagnuolo, pero el portero se quedó clavado en su sitio.

Al 35 de acción, el argentino Walter Gaitán y el brasileño Irenio Soares se perfilaron para cobrar una falta frente a la media luna; Soares aplicó suave toque que fintó al portero Adolfo Ríos y cedió para que Gaitán remitiera un cañonazo imposible de contener, y estableció el 1-1.

Para el segundo tiempo, Aguilas acentuó su ataque y al minuto 48 Campagnuolo lució en gran lance para desviar un remate de palomita de Cuauhtémoc Blanco. Un minuto más tarde, el guardameta argentino se debatía en su área para rechazar con los pies un disparo de Jesús Mendoza, y al 51 voló en gran salto para desviar hacia arriba un cabezazo de Mendoza.

Al cobro del tiro de esquina fue Pável, quien le pegó con efecto y el esférico trazó una comba que antes de incrustarse en la portería botó en el césped, mientras Kléber, quien cuidaba ese poste, no atinó a despejar, estorbó al portero, y se concretó el gol olímpico al 51.

En dos ocasiones Omar Briseño evitó el tanto en la portería de Tigres y con el ingreso de Aldo de Nigris y Jesús Olalde logró cierta paridad. A dos minutos del final, Leo Beenhakker, técnico del América, metió al Loco Abreu, pero al 90 de acción Hugo Sánchez anotó con tiro cruzado que el silbante Arredondo anuló por supuesta posición adelantada.

Beenhakker estimó que América muestra "un nivel de futbol bastante alto. Merecimos la victoria que fue más importante al lograrse ante el equipo más completo... Con lo que hicimos en el segundo tiempo el resultado es un poquito corto". Pável se alegró por sus goles, pero sobre todo porque redondearon una semana de tres victorias. "Del equipo hoy me gustó la convicción, se demostró que vamos en forma ascendente".

Nery Pumpido fue breve: "A veces cuando te quitan un gol legítimo como el de Hugo Sánchez pues te vas mal; ya estamos cansados de tantos errores arbitrales (...) Nunca hablamos del arbitraje, pero ahora vamos a empezar", advirtió.