Sólo cambia en el nombre, respecto de la del GDF

Sin novedades, la iniciativa de ley de cultura cívica que presentó el PRD

GABRIELA ROMERO Y RAUL LLANOS

En su iniciativa de ley de cultura cívica, la fracción del Partido de la Revolución Democrática (PRD) retoma casi en su totalidad el proyecto de ley de convivencia ciudadana que envió el gobierno capitalino a la Asamblea Legislativa del Distrito Federal (ALDF) hace algunos meses; mantiene las sanciones a sexoservidores, a quienes realizan arrancones, a vendedores ambulantes y a franeleros.

Como había adelantado hace unos días el coordinador de la fracción perredista, René Bejarano, entre las pocas modificaciones que se hacen a la propuesta del Gobierno del DF destaca el término cultura cívica, para evitar que los capitalinos la confundan con la ley de sociedades de convivencia, la cual se refiere a las formadas entre dos o más personas del mismo sexo.

De acuerdo con el proyecto de iniciativa de ley, que ayer comenzó a distribuirse entre los diputados del PRD, su objetivo es la preservación de la cultura cívica de los habitantes del Distrito Federal, "sancionando las acciones u omisiones que afecten el buen estado de los bienes públicos, la libre circulación en las vías y espacios públicos, la utilización adecuada de los lugares de uso común, la tranquilidad social y la continuidad del desarrollo normal de las actividades de los capitalinos".

Se propone sancionar con multa de uno a 10 días de salario mínimo o arresto de seis a 12 horas a quienes realicen expresiones o actos contra la dignidad de personas determinadas; a quienes posean animales sin adoptar las medidas de higiene necesarias u ocasionen molestia a los vecinos.

Quienes dañen, pinten, maltraten, ensucien o hagan uso indebido de las fachadas de inmuebles públicos o privados, estatuas, monumentos, postes, arbotantes, semáforos, entre otros, podrán ser sancionados con multa hasta de 20 salarios mínimos.

Se proponen sanciones de 11 a 20 días de salario mínimo o arresto de 13 a 20 horas por "invitar a la prostitución o ejercerla", impedir o estorbar de cualquier forma el uso de la vía pública, la libertad de tránsito o de acción de las personas, siempre que no exista permiso ni causa justificada para ello, así como por no recoger las heces fecales de un animal de su propiedad o bajo custodia, orinar o defecar en lugares públicos, o apagar sin autorización el alumbrado público.

En tanto, quienes ingieran bebidas alcohólicas o consuman, inhalen o aspiren estupefacientes en la calle, detonen o enciendan cohetes y juegos pirotécnicos o fogatas sin permiso de la autoridad podrían ser sancionados con multa de 21 a 30 días de salario mínimo o con arresto de 25 a 36 horas.

Por participar de cualquier manera, organizar o inducir a otros a realizar "competencias vehiculares de velocidad en vías públicas" (arrancones), se propone arresto de 20 a 36 horas.

En la previsión de la cultura cívica y la participación vecinal sobresale la regulación de la figura de colaboradores comunitarios que, previamente acreditados, tendrán acceso a los juzgados cívicos y celebrarán reuniones periódicas con los miembros de los órganos de representación vecinal.

Se prevé la creación de un registro de infractores, que servirá a los juzgados cívicos para la calificación de la reincidencia; a la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal para determinar acciones y operativos en zonas donde se cometan con mayor frecuencia infracciones cívicas, y al Ministerio Público para la ejecución de las órdenes judiciales vinculadas con averiguaciones previas en que se encuentren involucradas las personas sancionadas.